Profesores y padres reclaman a la consejera de Educación madrileña que acabe con sus intentos de hacer “negocio” subiendo las tasas y recortando las becas de comedor. La Marea Verde madrileña saldrá de nuevo a las calles este viernes 6 de junio para exigir a Lucía Figar que cese en sus intentos de hacer “negocio” con la Educación Infantil. Diversas plataformas de padres y profesores se concentrarán frente a la Consejería de Educación para denunciar los ‘ataques’ de la popular a las guarderías públicas, como la subida de tasas y el recorte a las becas de comedor, mientras destina 34 millones de euros al denominado ‘cheque guardería’ para las familias que han escolarizado a sus hijos en centros privados.
La concentración, que ha sido convocada por la Junta de Portavoces de Educación Infantil Pública 0-6, AMEIGI (Asociación Madrileña de Escuelas Infantiles de Gestión Indirecta), la FAPA Francisco Giner de los Ríos, FREM-CCOO y FETE-UGT Madrid, comenzará a las 18 horas. Bajo el lema ‘La Educación Infantil no es un negocio, es un derecho’, profesores y padres clamarán por una enseñanza “pública y de calidad para todos”.
Así se indica en el manifiesto que han elaborado dichas organizaciones para tal efecto, en el que critican la “alarmante situación” por la que está pasando la Educación Infantil en Madrid debido a las decisiones de Lucía Figar. En este texto afirman que la educación “es un derecho” y que nadie “puede quedar excluido” de la misma. Según denuncian, decenas de familias, debido a su situación económica, han tenido que rechazar la plaza tras el “abusivo aumento de las cuotas” y la “reducción drástica de las becas de comedor”.
Según denuncian, “todos los recortes que se están efectuando responden a motivos ideológicos y no de insuficiencia económica, ya que al mismo tiempo se destinan 34 millones de euros al ‘cheque guardería’ para las familias que han escolarizado a sus hijos en centros privados”, del que se beneficia la propia consejera de Educación.
Asimismo, defienden que la educación “no puede ser un negocio” y que “cada euro que se gestiona en estos servicios debe ir destinado a la mejora de los mismos, ya que es una inversión directa que beneficia a toda la sociedad, sin exclusiones”. Es por ello que la Marea Verde considera que “la privatización, encubierta o no, que se está produciendo en el sector de la Educación Infantil está permitiendo que empresas ajenas al mundo de la educación se estén lucrando a costa de ofrecer una peor educación y un deficiente cuidado a los niños”.
Los recortes de la Comunidad de Madrid, dicen, “ponen en riesgo el buen funcionamiento de la escuela pública” e influyen “en la calidad de la educación que reciben nuestros hijos”, por lo que exigen a Figar que acabe esta deriva y que se dote a las escuelas infantiles de los “suficientes recursos, tanto materiales como humanos”, para mantener la calidad. Actualmente esto no es así, denuncian, ya que las ratios profesor-alumno “son inviables” porque “no permiten la observación, la escucha y el acompañamiento individualizado” que se debería dar a cada uno de ellos.
Asimismo, piden que se reconozca la labor de los profesionales ya que son “pilares de una sociedad que aspira a ser libre y culta”. Según dicen, es necesario “poner en valor su trabajo y exigimos que su labor esté sujeta a convenios adecuados, que garanticen un sueldo digno y el respeto a sus derechos laborales”. Y también exigen a Figar que garantice su acceso a la formación continua.
Por último, piden a la consejera de Educación madrileña que se replantee la baremación mediante la cual se adjudican las escuelas infantiles de gestión indirecta, ya que en su opinión “el proyecto educativo y la trayectoria del equipo han de valorarse por encima de cualquier motivación de índole económica”, y exigen que las escuelas infantiles públicas “recuperen su gestión pública directa y que todas aquellas que fueron cedidas a empresas que buscan el negocio sean recuperadas de forma inmediata”.
