La Marea Blanca acusa a la Comunidad de Madrid de imponer la ‘censura informativa’ en los centros de salud

Sanidad

La Marea Blanca acusa a la Comunidad de Madrid de imponer la ‘censura informativa’ en los centros de salud

Manifestación de la Marea Blanca

La Coordinadora de Antiprivatización de la Sanidad Pública de Madrid señala que la Comisión Técnica de Coordinación de Información privada es una medida ante la presión y el éxito obtenido por la Marea Blanca a la hora de informar sobre la elección de centros públicos a los ciudadanos. Explican que con la creación del comité de control previo de la información para pacientes que se ha puesto en marcha en los centros sanitarios se impide a los profesionales de la salud que informen sobre determinados aspectos, como es por ejemplo el derecho a elegir un centro público para su asistencia. Esta Comisión, de la que tienen constancia desde el 15 de abril, mantiene según la Marea Blanca las “reuniones entre altas instancias de la Consejería con altos cargos directivos” con la única intención de dar orden de que los centros se “queden limpios” de aquellos papeles que informan a los usuarios de los centros de que sí pueden elegir centros públicos.

Desde la plataforma en defensa de la sanidad pública aseguran que hay una realidad que influye en la creación de este comité y es el incremento de pacientes que se niegan a ser tratados en centros privados, y es por ello por lo que la Consejería de Sanidad ha decidido “velar por la salud financiera de las empresas privadas” que ha ido abriendo centros privados y cerrando centros y retirando camas públicas, según la Marea Blanca. El aumento de la conciencia ciudadana ante estas informaciones en los distintos centros de salud, revelan según datos de la consejería que 11.000 pacientes han decidido en 2013 optar por la sanidad pública madrileña antes que optar por un centro privado.

Fuentes de la Coordinadora Antiprivatización de la Sanidad Madrileña al diario El Boletin exponen que este tipo de medidas creadas por la Consejería de la Comunidad de Madrid son un “filtro, una censura previa” que obliga y presiona a los médicos de los centros de salud a repetir el mensaje de que imponen desde la Consejería de Sanidad de Madrid.

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