El 15 mayo de 2013 Javier Fernández-Lasquetty jubilaba ‘por sorpresa’ a 455 médicos y facultativos de 65 años, negándoles acogerse a la prórroga directa La Comunidad de Madrid deberá abonar a un facultativo mayor de 65 años la retribución de ocho meses, ya que consideran que tenía pleno derecho de acogerse al reingreso directo. El fallo judicial estima de manera parcial el recurso que tramitaron los servicios jurídicos de AMYTS del médico a quien se le negó la posibilidad de permanecer en servicio, ante las medidas de sostenibilidad de la Consejería de Sanidad.
Los tribunales insisten en el derecho del médico al reingreso del servicio activo durante el periodo del 16 de mayo de 2013 hasta el 6 de enero de 2014. Según la sentencia “las cantidades que debería percibir serían las que hubiera percibido en situación de servicio activo”. Ante esta sentencia, existe posibilidad de recurso de apelación que de llevarse a cabo debe interponerse en un plazo de 15 días en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid. Desde la consejería aseguran que aún no han recibido la notificación de la sentencia y, por lo tanto, la sentencia no es firme. Pero la Comunidad ha recibido sentencias en su contra por estas jubilaciones forzosas. Concretamente, tres de ellas en las que no se ha admitido recurso alguno.
El Juzgado considera que la resolución que remite la Consejería para no prorrogar el servicio de los médicos es “parca y abstracta, indeterminadas y sin razones objetivas” para llevar a buen término la prórroga del servicio activo y llevar al médico a la “Jubilación forzosa”. Apunta la sentencia que se descontarán las cantidades que haya cobrado el facultativo en concepto de jubilación para evitar una “situación de enriquecimiento ilícito”.
