La prensa conservadora aplaude la “valentía” de Fabra de cerrar Canal 9

Cierre RTVV

La prensa conservadora aplaude la “valentía” de Fabra de cerrar Canal 9

Estudios de RTVV

El Mundo y ABC cierran filas con el presidente de la Generalitat de poner fin a la televisión valenciana en una decisión cuyos argumentos “son poco discutibles”. El presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, ha encontrado hoy en la prensa conservadora un importante apoyo en su decisión de cerrar Canal 9. El Mundo y el ABC, en sendos editoriales, aplauden el cierre del Grupo RTVV tras su “pésima gestión” y su “inviable continuidad” a tenor de su “descomunal plantilla”.

Una “decisión valiente”. Así se titula del editorial de hoy el diario de Pedro J. Ramírez el fin de la televisión pública valenciana decretado ayer por el Gobierno de esa región tras el fallo de la Justicia. Para El Mundo, Fabra es el primero “que se atreve a tomar una decisión tan drástica como prescindir de su cadena pública de televisión, algo que levanta mucha polémica, pero que es coherente con la política fiscal de recorte del gasto público y con lo que ha defendido siempre el PP”.

Y es que, para este periódico, los argumentos “son poco discutibles”. Según recuerda en este editorial, el dirigente popular se encontró al llegar al Gobierno valenciano con una televisión pública de 1.700 trabajadores que tenía una deuda acumulada de 1.200 millones de euros. “En un escenario de ajustes durísimos de servicios públicos como la Sanidad o la dependencia, mantener un mastodóntico aparato de propaganda política -no otra cosa son las autonómicas- resultaba una inmoralidad”, asegura El Mundo en el texto.

A esto sumamos habría que la aplicación del fallo de la Justicia “supondría 72 millones de euros en personal en los Presupuestos del próximo año, un gasto que Fabra asegura no poder asumir”.

Tras recordar que los trabajadores de RTVVE “son las víctimas de una situación que no han creado”, el diario de Pedro J. culpa a “los sucesivos gobiernos valencianos -del PP-“ de ser los responsables de una “gestión catastrófica, que ha inflado la plantilla hasta extremos escandalosos”. “Pero no es menos cierto que alguien tenía que pinchar una burbuja que engulle recursos públicos necesarios para servicios básicos”, destaca El Mundo que defiende que en la actual crisis “ningún medio de comunicación -ni público ni privado- puede permitirse el lujo de perder tantos millones al año”.

Por ello, insiste en la “decisión valiente” tomada por Fabra y reta al PP a “retomar uno de sus antiguos compromisos electorales” como la privatización de los entes autonómicos allí donde gobiernan. “Para ello el Gobierno de Rajoy cambió la ley de terceros canales, pero ahí siguen la televisión castellano-manchega, la TVG y Telemadrid. Esta última se redujo con un ERE, pero no ha sido privatizada”, explica este medio.

Mismo respaldo obtiene el presidente de la Generalitat en las páginas de ABC. El diario centenario por excelencia de la prensa española ha culpado del cierre a la decisión de la Justicia de tumbar el ERE. Un fallo judicial, “quizá razonado, pero cuyo coste económico resulta inasumible para la sociedad valenciana” y que, según este medio, “forzó” a Fabra a anunciar el cierre de su radiotelevisión autonómica.

Y es que, el “descomunal peso de una plantilla” hacía para el ABC “inviable la continuidad de la emisora”, de ahí que aplaude la medida tomada por el dirigente del PP.

Asimismo, arremete contra las emisoras regionales que “han sido desde su irrupción un pozo sin fondo para el contribuyente” y que no “tiene cabida” en la España “del déficit y los ajustes. Sobre todo, cuando, según este periódico, se ha “venido utilizando el presupuesto para programar una oferta de entretenimiento ignorada por la audiencia y cuya producción ha sido la excusa para subrayar supuestas ‘identidades nacionales’ y, de paso, fomentar el clientelismo partidista a través de contratos”.

Para terminar, y al igual que El Mundo, ABC destaca que ha sido un Gobierno del PP “el que da el primer paso adelante y desmantela la estructura no solo anacrónica y lesiva para la iniciativa privada, sino incompatible para cualquier medida responsable de ajuste y austeridad”.

Y, “por dramático que resulte para sus trabajadores, el definitivo cierre de Canal 9 es hoy el mejor servicio público que la Generalitat podría dar a la sociedad valenciana”.

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