El colectivo denuncia que, según cifras del propio Ministerio de Sanidad, solo se ha proporcionado tratamiento a 28.000 de los 52.000 pacientes afectados por esta dolencia. Los enfermos de Hepatitis C vuelven a la carga frente al Gobierno. Después de unos meses de tregua para evaluar el grado de desarrollo del Plan Nacional implantado para el tratamiento de su dolencia, este jueves han arrancado una concentración frente al Ministerio de Sanidad, al que exigen que revise ya el protocolo vigente.
La concentración ha sido convocada por la Coordinadora de Afectados por la Hepatitis C y ha comenzado al mediodía de este jueves con el objetivo de permanecer durante 24 horas a las puertas del Ministerio Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad. En las inmediaciones de la sede de la institución se ha instalado además una mesa informativa con el objetivo de difundir las cifras de cumplimiento del Plan Nacional que elaboró el Gobierno bajo la batuta de Ana Mato y su sucesor al frente de esta cartera ministerial, Alfonso Alonso.
El colectivo denuncia que, según cifras difundidas por el propio Ministerio, solo se ha proporcionado tratamiento a 28.000 de los 52.000 pacientes de esta tipología de hepatitis. Así, denuncian que tras este tiempo de aplicación, el Plan Nacional “ha quedado obsoleto” e insisten en la necesidad de proporcionar fármacos eficaces en primer lugar a enfermos en grados más avanzados de afectación así como a aquéllos que también son portadores de VIH.
Desde la Coordinadora se denuncia la tardanza en facilitar los fármacos que han revelado unas más altas tasas de efectividad cuando su generalización revertiría en un menor gasto sanitario a medio plazo al evitarse bajas médicas, trasplantes y diversos tipos de curas y asistencias médicas.
El candidato de UPyD se deja ver
Al inicio de la concentración, el candidato de UPyD a las generales del próximo 20 de diciembre, Andrés Herzog, se ha dejado ver junto a los afectados. El líder magenta ha mostrado su apoyo a los afectados al tiempo que ha urgido al Gobierno a que “se tome en serio el problema” que califica de “cuestión de salud pública”. Además, ha recordado que el desencadenante de que aun hoy haya gente sin tratamiento es el funcionar “a base de actualidad política y mediática” y no buscando soluciones de fondo.
