El ministro de Educación aseguró que una de sus prioridades era el aumento del gasto en becas, que solo cuenta con 2,8 millones más. El ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, fijó como una de sus principales metas en materia de presupuestos educativos el aumento de las becas y las ayudas al estudio, junto a la subvención de material escolar. Sin embargo, sus promesas se quedan en un crecimiento de la partida de becas de solo el 0,2%. En términos absolutos, el Gobierno prevé dedicar al apartado de ayuda al estudio 2,8 millones de euros más, que diferencian los 1.469,6 millones de 2015 frente a los 1.472,4 que recogen los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2016.
Sin embargo, el sustituto de José Ignacio Wert viene recordando desde su llegada a la cartera que la dotación presupuestaria para el sistema de becas se ha incrementado constantemente. Los PGE le respaldan, pues destacan que el presupuesto de becas ha crecido en 248 millones desde 2011. El proyecto presupuestario no falta a la verdad al decir que en 2016 las ayudas al estudio alcanzarán su dotación más alta de la serie histórica, pero el exiguo 0,2% hace que el máximo histórico se alcance por muy poca diferencia real.
No obstante, el presupuesto total para Educación es uno de los que más crece: más de un 9% respecto a 2015. La mayor parte de esa subida está motivada por la implantación de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), que este año entra en vigor en dos de los cursos de Secundaria, primero de Bachillerato y en Formación Profesional. Su partida asciende a los 454 millones de euros, frente a los 237 que requirió en 2015, y la diferencia es la práctica totalidad del crecimiento presupuestario del Ministerio de Educación.
