Los sindicatos acusan a la presidenta de Castilla-La Mancha de “desmantelar” la empresa pública dedicada a estas tareas, Geacam. La gestión de María Dolores de Cospedal al frente de la Junta de Castilla-La Mancha vuelve a estar en el punto de mira. Los sindicatos han cargado contra la presidenta popular por querer “desmantelar” la empresa pública encargada de la prevención de incendios forestales, Geacam, para dejar en manos de empresas privadas estas tareas. El primer paso, denuncian, será enviar al paro a toda la plantilla de la empresa pública a partir del 30 de septiembre.
Tal y como asevera CCOO en una nota, el objetivo de Cospedal no es otro que favorecer el negocio de las empresas privadas aplicando su hoja de ruta para “desarbolar” la Empresa Pública de Gestión Medioambiental de Castilla-La Mancha (Geacam). Según el sindicato, el supuesto “ahorro de dinero público” que se ha enarbolado para llevar a cabo un ERE que el próximo 30 de septiembre dejará a toda la plantilla en el paro durante meses, no será tal, porque se subcontratará la ejecución de las campañas de prevención de incendios de las que hasta ahora se encargaban los trabajadores de esta empresa.
Según el sindicato, el Gobierno manchego impulsará esta ‘estrategia’ de forma simultánea al despido de los trabajadores de Geacam. “Una vez más, lo que Cospedal llama ‘ahorro de dinero público’ solo es negocio ajeno a costa del Presupuesto de Castilla-La Mancha y de los derechos de los trabajadores”, señala José Sánchez de los Silos, secretario general de la Federación Agroalimentaria de CCOO CLM.
Para el sindicalista, está claro que la Junta “ha venido difundiendo falacias” sobre Geacam con el único fin de “desmantelarla”, y ahora queda de manifiesto que “el objetivo nunca fue ahorrar ni mejorar la eficiencia, sino abrir espacios para subcontratar la ejecución de las políticas públicas que tiene encomendadas la empresa pública”.
Situación que ya ha empezado, ya que se encomendó a la empresa pública estatal Tragsa la gestión de los alquileres de vehículos para la campaña de incendios 2014, tarea que hasta entonces desempeñaba Geacam. Y ahora la propia Tragsa, afirma CCOO, “está contactando con alcaldes y ediles de municipios rurales manchegos para conocer la ‘disponibilidad de personas en paro’ en sus respectivas localidades para enrolarles en la campaña de prevención”.
Cospedal ha ido ahora “más allá”, ya que tras imponer la ejecución del ERE de octubre de 2012 para enviar al paro en el invierno a toda su plantilla, pretende “subcontratar las tareas de prevención con la propia Tragsa y/o con otras empresas privadas”, denuncia Sánchez de los Silos, que recuerda que estas tareas deberían realizarlas los trabajadores de Geacam porque son los que tienen la “formación adecuada” para ello.
“Estas tareas las deberían realizar los trabajadores de Geacam, a los que se formó en su día pero a los que este Gobierno envía al paro, a consumir sus prestaciones y a consumir dinero público del Servicio Público de Empleo”, critica el sindicalista, que dice que “mientras con más dinero público, ese que alegan no tener, pagarán a otra u otras empresas por realizar las imprescindibles tareas de prevención. Porque, les guste o no, hasta la consejera de Agricultura sabe ya que abandonar en invierno las tareas de prevención convierte nuestros montes en un polvorín en verano”, como han quedado los dos incendios registrados este año en Cogolludo (Guadalajara) y en Valdeverdeja (Toledo).
Es más, CCOO afirma que si, como Mariano Rajoy y la propia Cospedal venden, estamos saliendo de la crisis, lo lógico sería “adecuar la plantilla de Geacam a las necesidades del servicio, que sólo por intereses espurios va a dejar de realizar la empresa pública manchega para entregárselos a Tragsa o a otras empresas privadas”.
“Lo más lógico y razonable es que el Gobierno de Castilla-La Mancha deje de ocuparse de facilitar negocios ajenos con el presupuesto para la lucha contra los incendios forestales, y que lo dedique a mantener y crear empleo en Geacam. Y a adecuar las instalaciones en las que prestan servicio día a día sus trabajadores”, ya que según el sindicato “muchas no disponen de luz, agua corriente ni vestuarios”.
