La guerra de manifiestos por y contra la independencia catalana cuenta con un nuevo miembro. Dempeus per la Salut Pública ha redactado el suyo propio a favor de la sanidad universal. Con el telón de fondo de la lucha de manifiestos a favor y en contra de la independencia de Cataluña, una plataforma por la defensa de la sanidad pública salta a escena. La organización Dempeus per la Salut Pública (En pie por la Salud Pública) ha lanzado su propia proclama en la que defiende que el verdadero “derecho a decidir” pasa también por voz y voto en el sistema sanitario catalán.
En un amplio documento, los representantes de esta plataforma, y otros de distintas entidades e instituciones se suman para criticar la “propaganda ideológica” empleada por los líderes catalanes que “muy poco tienen que ver con la salud pública y la soberanía del pueblo de Cataluña y el bienestar de su gente”. Entre los firmantes figuran miembros de la comunidad educativa de la Universidad Pompeu Fabra y de la revista CafèAmbLlet que, surgida tras las protestas del 15M, destapó supuestas tramas de corrupción en el sistema sanitario catalán hace un año.
Nueve puntos desglosan por qué sus promotores piensan que la participación ciudadana es la “clave de la soberanía de los pueblos” en salud y sanidad. Denuncian que mientras los líderes de la región sostienen que “cualquier empeoramiento de la calidad y la atención sanitaria pública es un mito” con declaraciones que “desafían nuestro entendimiento” no hay día en el que no “nos golpea la noticia de un nuevo recorte en salud, cierre de camas, quirófanos y servicios, de incremento de las listas de espera, de nuevas precarizaciones” laborales y derivaciones a la privada.
El alegato por la defensa de una Sanidad “pública, universal, de calidad, integral, solidaria y de igualdad garantizada”, muestra la preocupación de sus defensores por el “momento crítico” que este sistema atraviesa. Denuncian que “el servilismo a la industria farmacéutica y de los productos sanitarios, y a los fondos de inversión”, han postrado a la sanidad a perder su soberanía y encarar una situación que “puede hacer imposible su recuperación”.
La receta que proponer “para conseguir la soberanía” pasa por “actuar sobre los verdaderos condicionantes de la salud”. Así recuerdan que “tampoco en Cataluña, la mayoría de las personas tienen una situación vital, económica o laboral adecuada” que garantice una vida “plenamente saludable” y aluden a dos de los asuntos que más polvareda han levantado en la región levantina en los últimos meses: la malnutrición infantil y el incremento de los suicidios.
“No se emprenden las medidas que pueden afectar positivamente a las personas”. “No se hacen las políticas que la población necesita, ni las inversiones sociales y de refuerzo de los servicios públicos”, prosigue el manifiesto en pro de una Cataluña soberana en cuestiones sanitarias. Acusan a los políticos de tomar “decisiones cruciales relacionadas con valores sobre lo que es bueno y malo para la sociedad y la salud en el terreno de la política”. Cargan concretamente contra la sectorial de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), que en sus últimas propuestas planteaban no incluir en la partida de administración pública los consorcios sanitarios. Una propuesta que, bajo los auspicios de la directora general de la Unión Catalana de Hospitales, Helena Ris, y con el guión marcado anteriormente por Jose María Via, asesor del presidente Artur Mas, renunciaría a cualquier control de la gestión de los fondos públicos que a estos consorcios se destinan.
Para evitar atropellos como el anterior, exigen la “restauración” de la Agencia Catlana de Salud Pública y el fin de los copagos establecidos en el sistema y el fin de las derivaciones hacia clínicas privadas. Una medida, que aseguran, supondría también “la eliminación de las puertas giratorias” de las que se valen los políticos. En el octavo punto de los nueve de que se compone el manifiesto, también muestran su gusto por la actual ley del aborto a la par que defienden el “derecho” a someterse a esta práctica en el sistema público de salud.
