El desplome que la operadora de telefonía sufre desde que empezó el año en máximos supone ya la pérdida de un 28% de su capitalización bursátil.
La gráfica de Euskaltel reacciona con alzas de hasta el 3% al voto de confianza de los analistas de Banco Sabadell. Desde la entidad consideran que el valor cuenta con potencial suficiente como para recuperar e incluso rebasar el precio de su debut en Bolsa, lo que supone una cancha alcista del 34% para la firma vasca.
Los analistas del Sabadell consideran ahora que el precio objetivo de medio plazo en la operadora de telefonía se encuentra en los 10,70 euros por acción. Un precio que tan solo fue superado en 0,20 euros por los máximos intradía de la jornada de su debut como cotizada el pasado 1 de julio de 2015 y que choca con la previsión más generalizada de sus colegas, que apuntan en mayor número hacia la continuidad de la corrección bajista.
A pesar del enérgico avance de este jueves, que ha situado a Euskaltel entre los valores más pujantes de toda la Bolsa española, las cotas más elevadas de la primera mitad de la sesión no eran suficientes para superar sus resistencias más inmediatas: 8,26 euros por acción frente a los 8,56 en cuya superación que se encontraría la primera señal clara de giro alcista.
Esta segunda sesión consecutiva de alzas lo que sí hace es confirmar la superación de los 8,00 euros por acción, una cota no tan importante en lo técnico como en lo psicológico y que ha permitido el regreso de dinero de perfil más especulativo. No obstante, los volúmenes de negociación se quedaban dentro de su media habitual, lo que despertaba los recelos entre los gestores de carteras menos cautivados por la cotizada.
Más allá de los consejos de inversión, el verdadero protagonista de la recuperación de precios que se ha apuntado la operadora es el apetito de algunos inversores institucionales. Así este mes se ha conocido que Hengistbury Investment y UBS han incrementado sensiblemente sus posiciones: la primera del 3,35% al 5,13% y la gestora del banco suizo desde el 6,07% al 7,85% en una cartera que incluye también derivados financieros.
