La inmobiliaria es blanco frecuente de las apuestas especulativas, que ya han aupado su cotización en un 30% desde que empezó el año gracias también a Cuba.
Los volúmenes de negociación se desbocan por segunda sesión consecutiva en Urbas. La promotora inmobiliaria marca el cambio de manos de casi 7,5 millones de acciones apenas tres horas después del inicio de sesión. La atípica cifra, incluso para un cierre de sesión, llega mientras sus dos principales accionistas preparan mayor músculo financiero para la cotizada.
En la sesión bursátil de ayer, en la que Urbas se apuntó alzas del 8,33% al cierre, cambiaron de manos más de 35 millones de acciones de la compañía, uno de los registros más elevados para lo que va de año. En la sesión de este jueves, todo apunta a que se repetirá un abultado volumen, si bien la remontada de precio parece más complicada al haber alcanzado ayer la cota de los 0,013 euros por acción, infranqueable desde mediados del pasado mes de marzo. Es así que lo que se ha producido ha sido una corrección del 7,7% hasta los 0,012 euros por título
La especulación en torno al valor se ha redoblado en torno a la nueva vuelta de tuerca que los dos grandes accionistas del grupo han dado a un pacto de financiación vigente desde el año 2014 y que, desde entonces, se ha revisado en varias ocasiones. En virtud de este, tanto Robisco Investment como Nova Lurani, sociedades vinculadas a Juan Antonio Ibáñez -presidente y consejero delegado de la cotizada- se han comprometido a aportar soluciones para la liquidez de la compañía más allá de lo pactado en un primer momento.
El hecho relevante remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) para explicar esta modificación recoge que al darse el supuesto de “capitalizaciones de los saldos dispuestos en el ejercicio 2014 y 2015” recogidos en el pacto inicial para el establecimiento de una línea de crédito fijada en su origen en cuatro millones de euros, “las partes han pactado nuevas disposiciones sobre dicha línea de crédito en función de las necesidades de tesorería que se pongan de manifiesto”. Sin embargo no se especifica cuáles son estas modificaciones.
A pesar de la dominancia de Ibáñez tanto en el accionariado como en la cúpula directiva de la compañía, se especifica que “se ausentó de la sesión” en la que el consejo de administración de Urbas dio su visto bueno a la alteración del pacto de financiación de la compañía mediante una herramienta que permite que los préstamos no figuren directamente en su cartera de pasivo, aliviando su compleja situación financiera.
Estas novedades llegan además cuando Urbas se dispone a hacer frente a uno de sus más ambiciosos proyectos: un macrocomplejo turístico en Cuba. La española tiene previsto desembarcar en la península de Rancho Luna-Pasacaballos a través de la sociedad Caribbean Resort & Golf para la la construcción en la de un nuevo puerto deportivo, seis campos de golf, seis hoteles de cinco estrellas, tres apartahoteles, 1.500 villas y 3.000 apartamentos turísticos.
