Las ‘apps’ preinstaladas desatan un nuevo frente entre Google y Bruselas

Las ‘apps’ preinstaladas desatan un nuevo frente entre Google y Bruselas

Smartphones

La Comisión Europea considera que la compañía abusa de su posición dominante al obligar a los fabricantes a instalar las aplicaciones predeterminadas de Google en sus dispositivos si quieren incorporar Android. La Comisión Europea ha acusado formalmente a Google este miércoles de abusar de su posición dominante para favorecer sus propias aplicaciones. En concreto, Bruselas critica que la compañía estadounidense obligue a los fabricantes de móviles que quieran incorporar el sistema operativo Android a instalar de forma predeterminada algunas ‘apps’ y servicios como el navegador Chrome.

De momento, el pliego de cargos emitido por el organismo comunitario es preliminar y la compañía puede presentar alegaciones, pero en el caso de que la Comisión Europea considere que Google está cometiendo prácticas anticompetitivas, la firma podría enfrentarse a una multa de hasta el 10% de su facturación en el Viejo Continente. Teniendo en cuenta los ingresos, la sanción ascendería a 6.500 millones de euros.

El gigante de Internet ya se ha apresurado a desmentir las acusaciones: “cualquier fabricante puede decidir si cargar o no” las aplicaciones de Google, así como “añadir otras ‘apps’”. En este sentido, especifica además que “los acuerdos con los ‘partners’ son completamente voluntarios, cualquiera puede utilizar Android sin Google”. Según explica el comunicado realizado por la compañía estadounidense, esto último es lo que hace, por ejemplo, Amazon.

La empresa de Mountain View subraya además que “Android es gratuito” para los fabricantes, y “lo costoso es desarrollarlo, mejorarlo, mantenerlo seguro y defendernos de demandas de patentes”, por lo generan sus ingresos a través de las ‘apps’ y los servicios de Google distribuidos mediante Android.

Por otro lado, se defiende de las críticas relativas a su ‘anticompetencia’ recordando que cientos de fabricantes pueden desarrollar sus ‘smartphones’ y tabletas gracias a Android, lo que permite a su vez que los usuarios puedan “disfrutar y elegir entre múltiples dispositivos y aplicaciones a precios más bajos”. “Nuestro modelo de negocio permite a los fabricantes reducir sus costes, tener mayor flexibilidad al tiempo que ofrecen a los clientes un control sobre sus dispositivos móviles sin precedentes”, señala la empresa tecnológica en la nota.

Esta mañana, tras la publicación del pliego de cargos, la comisaria europea de Competencia señalaba que “sobre la base de la investigación que hemos llevado a cabo hasta el momento, creemos que el comportamiento de Google niega a los consumidores (el acceso a) un abanico más amplio de aplicaciones y servicios móviles y obstaculiza el camino de la innovación a otros actores, incumpliendo las normas antimonopolio de la UE.

No es la primera vez que el Ejecutivo comunitario abre un frente contra Google, el año pasado se investigó el posible abuso de la compañía para favorecerse en los servicios de comparación de compras.

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