Ambos han coincidido en la importancia de la relación franco-alemana tanto para el bienestar de las dos potencias como para el futuro de la Unión Europea. Las reformas anunciadas por Manuel Valls han sido celebradas por la canciller alemana, Angela Merkel. La canciller se ha mostrado “impresionada” por los esfuerzos realizados por Francia después de que Valls se comprometa a cumplir las medidas anunciadas. Aunque Merkel ha reiterado su apuesta por el Pacto de Estabilidad europeo ante sus propuestas de mayor flexibilidad e inversiones.
Merkel ha deseado al Gobierno francés éxito en la adecuación y ejecución de las nuevas medidas y ha hecho especial mención en el compromiso de Francia y Alemania en llevar a cabo de forma conjunta los esfuerzos que “sean necesarios”.
Por otro lado, la canciller ha reconocido que su mayor preocupación reside en la estabilidad del euro para impulsar el crecimiento de Europa y subrayar la credibilidad de sus decisiones.
Valls ha afirmado que es necesario reforzar los esfuerzos financieros y se ha comprometido a llevar a cabo las reformas estructurales que han sido anunciadas y no implementadas. El primer ministro francés ha elogiado el diálogo “directo y en profundidad” mantenido con la canciller.
Por último ha defendido que ha ido a Alemania para convencer de las reformas y no para “pedir indulgencia”.
