Bloomberg calcula que este podría ser el importe que la Comisión Europea exija a la tecnológica si decide imponerle medidas fiscales más duras. La Comisión Europea parece dispuesta a endurecer su batalla contra los mecanismos fiscales de las grandes multinacionales para evadir impuestos en el Viejo Continente. Después de exigir a Bélgica recuperar 700 millones de gravámenes no cobrados a estas empresas, estrecha su cerco a Apple. El organismo lleva investigando los tejemanejes de la compañía de la manzana mordida en Irlanda más de un año y podría obligarle a pagar hasta 8.000 millones de dólares (unos 7.350 millones de euros) en impuestos atrasados.
Según publica Bloomberg en base a un profundo análisis realizado por un equipo especializado, está sería la cifra que los de Cupertino deberían a las arcas europeas si las autoridades deciden imponer a Apple unas normas contables más duras. En concreto, la publicación estima que Bruselas podría ordenarle el pago de una tasa de impuestos del 12,5% sobre los beneficios de 64.100 millones de dólares (cerca de 59.000 millones de euros) que la firma generó en Europa da 2004 a 2012.
La Comisión Europea considera que la empresa cofundada por Steve Jobs tiene un acuerdo fiscal con Irlanda, donde se encuentra su sede en el Viejo Continente, con condiciones muy favorables para la empresa. Esta calcularía sus cuentas en base a costes operativos más bajos, lo que disminuye drásticamente su factura al Estado irlandés.
Bloomberg apunta que la decisión de la Comisión europea respecto al caso de Apple podría llegar en marzo. De confirmarse los pronósticos de la publicación, no sería solo una nefasta noticia para el gigante tecnológico, la compañía más valorada del mundo, sino que sentaría un precedente, pues muchas otras multinacionales estadounidenses utilizan este tipo de mecanismos para pagar menos impuestos por sus negocios en Europa.
