La Audiencia Nacional cita para esta mañana a Liberbank y sindicatos con objeto de aclarar sentencia del ERE de junio de 2013. Capítulo final en la dura pugna entre Liberbank y los sindicatos sobre el ERE de verano de 2013. La Audiencia Nacional ha citado para hoy día 29 (a las 10:00 h) a la dirección del banco y a los representantes de los trabajadores para una vista sobre la ejecución de sentencia referida a la anulación del primer ERE aprobado en verano del 2013 y anulado por la propia Audiencia Nacional en una decisión ratificada por el Tribunal Supremo.
Según los cálculos del banco surgido de la fusión de Cajastur (CCM), Caja Cantabria y Caja Extremadura, la aplicación de la sentencia le supondrá un desembolso de seis millones de euros, mientras que los sindicatos que llevaron a Liberbank a los tribunales reclaman la devolución a la plantilla de casi 70 millones de euros. La tesis de los trabajadores es que, una vez anulado el ERE que estuvo en vigor desde junio a diciembre de 2013, el banco debería devolver “la totalidad de lo descontado ilegalmente durante ese periodo”. La última palabra, la tendrá finalmente la Audiencia Nacional.
En una sentencia dictada el 22 de julio del año pasado, el Supremo decidió rechazar el recurso de casación interpuesto por Liberbank, confirmando la sentencia de la Audiencia Nacional del 14 de noviembre de 2013. En esa fecha, y estimando parcialmente la demanda presentada por CSI y STC-CIC, a la que se unieron CSICA, CSIF y APECASYC, la Audiencia Nacional decidió anular tanto el expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) acordado por Liberbank con UGT y CCOO el 25 de junio de ese mismo año, como el ERTE unilateral que había anunciado unas semanas antes el banco.
La Audiencia Nacional entendió que hubo “vulneración de la libertad sindical”, y condenó al banco a “reponer a los trabajadores en las condiciones anteriores a la aplicación de las medidas”.
La sentencia del Supremo no sólo apuntó a Liberbank, sino también a los sindicatos UGT y CCOO, que firmaron ese acuerdo. De hecho, los dos grandes sindicatos fueron condenados a abonar 600 euros en concepto de daños morales.
