Como no podía ser de otro modo hoy le he vuelto a preguntar a mi jefe por la presunta trama de corrupción del Partido Popular. Bueno, más bien por la reacción del partido a la información que publica hoy el País sobre las cuentas manuscritas de los tesoreros entre 1990 y 2008. Y creo que un 10 no le pone.
Según me cuenta, la defensa que ha hecho Cospedal sobre la transparencia del PP, ni es defensa ni es nada. Defensa sería poner encima de la mesa los papeles que desacrediten la información de El País porque el argumento de “nos tienen manía” no es ningún argumento.
El señor que me paga mi precario ‘sueldo’ me dice además que hay que diferenciar entre la responsabilidad judicial y penal y la policía. Bárcenas fue el máximo responsable de las cuentas del PP y ha resultado que tenía una cuenta en Suiza con 22 millones de euros. Por aquí es por donde hay que empezar, me dice mi jefe, y a partir de ahí investigar todo y si hay que llevar a este hombre a la cárcel o a galeras, que se haga.
En definitiva, que la estrategia del “y tú más” ya no sirve y que la culpa no es de quien lo cuenta, sino de quien lo hace.
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