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La cosa de la tasa

De momento no es nada definitivo pero ya se sabe que aquí no hay nada mas definitivo que lo provisional. Sucede que las nuevas tasas judiciales no son oficiales pero rulan por ahí con gran coña puesto que Gallardón dice que para recurrir una multa de Tráfico de cien euros tendrás que abonar una tasa de doscientos, es aquello de que cuesta mas el arroz que el pollo.

Las nuevas medidas también asuntos tan curiosos como que ya no habrá que pagar por nacimiento o el óbito. No deja de ser un detallazo de Gallardón que cuando uno está en las últimas y apenas pueda preguntar con un hilito de voz: “¿Qué le debo buen hombre?”, le responda el funcionario: “nada, amigo, esto está pagado, el siguiente peaje del cielo no lo sabemos, por si acaso lleve suelto”.

Ahora veremos cómo quedan las nuevas tasas y cómo aplaca el ministro mas valorado según el CIS el resto de aranceles. Tiene pinta que Diaz Ferrán los vaya a estrenar todos, (menos el del óbito porque todavía no hay necesidad, dejémosle reservado para lo mas tarde posible). La Justicia en España era un carajal como decía Pedro Pacheco siendo alcalde de Jerez, pues debe ser que hay quién le ha encontrado el sentido de que los espectáculos se pagan. Ahora bien, el público exige y no se le puede dar trato de tercera regional preferente y cobrándole como si en el juzgado rematara las faltas Ronaldo. Casi era mejor pagar lo que se debía por el óbito e irse a la otra vida con la pata tiesa y la sensación de que te han timado lo justo.

Cuando esté acabada tan magna obra el Ministro de Justicia nos hará una bonita explicación de intenciones de las que le gustan, unas de esas historias que empiezan en Gayo, o en Justiniano y que terminan diciéndole que como le pille el radar a 122 la ha liado si quiere recurrir.