La precariedad de las camareras de piso, trabajadoras autodenominadas como ‘las kellys’, está cerca de ser un tema que aborde el Gobierno de Mariano Rajoy. Nueva Canarias (NC) –que ha cerrado varios acuerdos gubernamentales en esta legislatura- está negociando con el Ejecutivo la puesta en marcha de una mesa de trabajo para abordar el problema laboral que sufre este colectivo.
Y es que el conflicto de ‘las kellys’ ha ido cogiendo fuerza en la escena pública. Después de constituirse como asociación, el colectivo aterrizó en el Congreso de los Diputados para reclamar la modificación del artículo 42.1 del Estatuto de Trabajadores con la que consiguieron que se pretenda igualar las condiciones de los y las trabajadoras de empresas de subcontratación con las del personal contratado directamente por la empresa principal. Poco después, fueron las encargadas de hacer el pregón en unas fiestas madrileñas y ahora han conseguido la atención del Gobierno.
Según han informado los nacionalistas canarios, la constitución del grupo de trabajo forma parte del compromiso que adquirió el Ejecutivo con NC para sacar adelante los Presupuestos Generales del Estado de 2017. Una mesa que estaría compuesta compuesta por el Gobierno central -con representantes de los ministerios de Empleo y Seguridad Social, y del de Energía, Turismo y Agenda Digital-, así como las comunidades autónomas y organizaciones sindicales y empresariales del sector.
Los cálculos de NC pasan porque este mismo mes de septiembre pueda ponerse en marcha el grupo de trabajo. Y es que los canarios no olvidan que en lo firmado con Rajoy se encuentra un apartado para “mejorar la calidad del empleo en el sector de la hostelería. Tal y como han recordado desde la formación, tal y como ha recogido Europa Press, ambas partes acordaron promover la creación de una mesa de trabajo “tripartita y paritaria”.
De esta manera, el objetivo que se ha marcado NC tiene que ver con analizar todas las cuestiones que redunden en la “mejora de las condiciones de trabajo, con especial atención a la estabilidad en el empleo, la regulación del tiempo de trabajo y la seguridad y salud laboral, tratando, entre otros asuntos, las condiciones sociolaborales de las camareras de piso”. Por su parte, las principales organizaciones sindicales también han reclamado atención a ‘las kellys’.
CCOO y UGT han anunciado que están trabajando en dos proyectos que llevarán a la Comisión del Pacto de Toledo del Congreso, con el fin de “revertir la precariedad de este colectivo”. Asimismo, los dos sindicatos han instado a los grupos parlamentarios en que legislen para que se apliquen coeficientes reductores para facilitar las prejubilaciones y el reconocimiento de enfermedades profesionales.
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