Panrico y RTVE ponen a prueba a la unidad de acción de CCOO y UGT

Las dos principales fuerzas sindicales de España no han logrado ponerse de acuerdo a la hora de abordar los problemas de los trabajadores de Panrico y RTVE. La situación que viven los trabajadores de Panrico y de RTVE pone de manifiesto las primeras rupturas que hay en la unidad de acción de los principales sindicatos de España, CCOO y UGT.

Quizá las discrepancias entre ambas federaciones no sean muy revelantes por el volumen de despidos previstos en las dos empresas-1.900 en Panrico y 1.500 en RTVE-, si lo comparamos con los cinco millones de parados que hay en España. Sin embargo, la difusión de sus diferencias alcanzan un mayor ratio de población por lo que representan ambas empresas.

RTVE es una televisión pública que llega a todo el país y Panrico es la fabricante de productos de bollería tan clásicos como Donutts, Donettes, Bollycao o La Bella Easo. Además, está presente, con fábricas e industrias auxiliares, en muchas comunidades (Andalucía, Castilla y León, Cataluña, Aragón o Murcia).

Es tal el punto de su importancia que algunos presidentes de estas regiones ya se han reunido con los empleados afectados, como, por ejemplo, el jefe del Ejecutivo castellano, quien se comprometió a financiar las nóminas de los trabajadores, o la nueva mandataria andaluza, Susana Díaz, que se ha reunido con ellos para interesarse por su situación.

En estos casos, además, esa ‘ruptura’ parece más grande por la línea de actuación que adoptan los dos sindicatos. Mientras que UGT apuesta, según dicen ellos, por una actitud pactista para negociar con los representantes de las compañías y asegurar el futuro de sus trabajadores, CCOO tiende hacia una actitud más radical.

En Panrico, según una información de El País, la dirección de la compañía y algunos sindicatos, entre los que se encuentra UGT, han llegado a un acuerdo sobre el ERE que afectaría a 745 trabajadores y una rebaja salarial del 18% para el resto de los empleados.

Tres representantes de CCOO han apoyado este acuerdo, aunque los que representan a las fábricas donde no hay previstos despidos, Zaragoza y Puente Genil, y a la de Sevilla, en la que habrá 35 ceses.

La mayoría de los representantes de CCOO, representados en la Federación Agroalimentaria, y más que nada en la planta donde llevan más tiempo de huelga, Santa Pèrpetua, están planeando impugnar el acuerdo en los tribunales. El motivo, que el pacto obvia que el pasado sábado se rechazó esta medida con 21 votos.

Algo parecido con la situación que se está viviendo en RTVE. El pasado lunes, CCOO llamó a la abstención en la segunda consulta del próximo 27 de noviembre sobre el convenio del ente público con los trabajadores. La razón que esgrimió el sindicato es que ese preacuerdo, en el que los empleados perderán muchos de sus derechos, ya fue rechazado por los trabajadores en la primera votación, acaecida el pasado 23 de octubre. Una elección en la que CCOO promocionó el ‘No’ y UGT el ‘Sí’.

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