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Las farmacias madrileñas se quedan sin impresos contra el euro por receta y recurren a las fotocopias

Farmacéutica dispensando medicamentos

La insumisión al euro por receta implantado por Ignacio González es cada vez mayor. Así lo han indicado a EL BOLETÍN algunos farmacéuticos de la región, que se han visto obligados a fotocopiar los formularios contra esta tasa, copias que pagan de su propio bolsillo, ante el escaso número de impresos suministrados por la Comunidad de Madrid. Algunas boticas del centro sólo han recibido 20 hojas.

Los madrileños no están dispuestos a pagar un euro por cada receta que lleven a la farmacia. Esa es la conclusión que se desprende al hablar con los boticarios del centro, que no dan abasto para explicar a los ciudadanos lo que hay que hacer para no abonar la tasa y para ayudarles a rellenar los impresos de insumisión.

Unos formularios que se han agotado en muy poco tiempo. La medida de Ignacio González entró en vigor a principios de enero, y apenas una semana después ya se habían agotado, según han explicado los farmacéuticos a este diario, porque la Consejería de Sanidad distribuyó pocos impresos. Ante ello, los boticarios han decidido fotocopiar estos documentos, copias que pagan de su bolsillo, para que todo el que quiera pueda negarse a pagar el euro por receta.

Tal es la insumisión, explican las fuentes consultadas, que ni siquiera la cantidad de información a rellenar en los impresos echa para atrás a los madrileños. Los usuarios pasan el tiempo que haga falta en la farmacia con tal de no abonar la tasa, y si hay algunos ciudadanos con dificultades para poder cumplimentar los folletos, los farmacéuticos se ofrecen a hacerlo ellos mismos.

No obstante, puede que esta situación no se mantenga durante mucho tiempo, ya que el Gobierno de Mariano Rajoy ha anunciado que recurrirá la tasa madrileña ante el Constitucional, igual que hizo con el euro por receta en Cataluña. Esta misma semana el alto tribunal ha dictaminado la suspensión cautelar del cobro en la Generalitat durante cinco meses, algo que previsiblemente se repetirá en el caso de la Comunidad de Madrid.

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