La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha anunciado hoy que está estudiando un plan para «ahorrar en servicios» que supondría el fin de la recogida diaria de la basura, así como la reestructuración de empresas públicas.
Ana Botella tiene una prioridad: “cuadrar las cuentas”. Para ello, está dispuesta a que Madrid sea una ciudad más sucia siempre y cuando pueda reducir los más de 6.000 millones de euros de deuda municipal que heredó de su antecesor en el cargo, Alberto Ruiz Gallardón.
Con esta idea en la cabeza, la alcaldesa, en RNE, ha anunciado que se está planteando dejar de recoger la basura a diario, ya que «es una de las pocas grandes ciudades o la única que lo hace a diario menos el 24 y el 31 de diciembre».
Asimismo, el consistorio quiere «reducir gastos de funcionamiento», por lo que estudia reducir coches oficiales, teléfonos móviles o dejar edificios en alquiler y vender otros de propiedad municipal «que no necesitamos» y que es «el momento adecuado» para sacar a la venta.
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Botella planta batalla a la recogida diaria de basura