El Ayuntamiento ha suspendido el concierto por un informe de la policía Municipal que advierte del «peligro de alteración del orden público». El Coordinador General de Emergencias, Jesús Guereta López, miembro del gobierno de Ana Botella, en el Ayuntamiento de Madrid, ordena la prohibición del concierto, por apreciarse que en el desarrollo del mismo se puedan producir alteraciones del orden público con peligro de personas y bienes. En caso de incumplimiento de autoridad, aseguran que la autoridad competente estará habilitada para suspender el concierto de manera inmediata.
“Las canciones de Soziedad Alkohólika están cargadas de opiniones con excesos verbales hirientes y desafortunadas” según un expediente del Área de Gobierno de Seguridad y Emergencias colgado en la página web del grupo. La Ley de Espectáculos, prohíbe las actividades que inciten o fomenten la violencia, el racismo, la xenofobia y cualquier otra forma de discriminación. Esta tarde, al rededor de las cinco, Cristina Cifuentes ya había pedido a la Fiscalía que se investigara este concierto para su prohibición.
En su página web, Soziedad Alkohólika muestran su indignación por “imponer la censura a menos de una semana del concierto”. Desde la acusación realizada por la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) han pasado ya nueve años, exactamente el mismo tiempo que lleva el grupo reivindicando su no participación activa en actos violentos, así como niegan la humillación hacia las víctimas del terrorismo en cualquiera de sus canciones.
En el comunicado expresan su preocupación frente a los “argumentos y falacias” en los que se sustenta la medida tomada por las autoridades madrileñas, relatándolas una a una. El informe sostiene como argumento la denuncia hace 8 años de AVT, ratificada como sentencia absolutoria a favor del grupo por el tribunal supremo; “se han publicado en las redes sociales opiniones de grupos de ideología contraria y que se oponen a su celebración”, es una de las frases sostenidas en el comunicado policial y que el grupo critica y tilda de “falacia”. Además, desmienten otra afirmación del comunicado sobre una supuesta revuelta en un festival donde ellos participaron.
“Se les llena la boca de ‘libertad de expresión’ y claman al cielo cuando las cosas pasan lejos, ya sea en China, en Venezuela o en Paris, pero las máscaras caen cuando son ellos los que agreden directamente el derecho a la libertad de expresión que en el fondo no lo soportan. Hipócritas!! La gente que lo desea, si le dejan, acude en libertad a nuestros conciertos a disfrutar y a escuchar otra música y otras ideas diferentes a las que se imponen en la inmensa mayoría de medios. (…) No hay mas cera que la que arde, estamos en pleno siglo XXI pero la censura y las agresiones a la libertad de expresión se siguen imponiendo desde su régimen”. Este es el final del comunicado, en el que añaden volverán a Madrid porque la gente tiene derecho a escuchar su música.
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