La revisión del Tratado de Libre Comercio entre los dos países fronterizos anunciada por el candidato republicano podría suponer un duro golpe para la economía de México. El candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, gana terreno a su rival demócrata con cada nueva encuesta. Una situación que en los últimos días ha reforzado la polémica suscitada en torno a los problemas de salud de la ex primera dama Hillary Clinton. Sin embargo, en esta lucha por el poder, el más debilitado es el peso mexicano.
La caída del preso frente a otras divisas internacionales es patente desde que los dos grandes partidos políticos estadounidenses eligieron a sus respectivos candidatos. Más en las últimas semanas en las que la balanza se va inclinando hacia el abanderado republicano, que no ha dudado en recrudecer su duro lenguaje contra sus vecinos del sur: los mexicanos a los que amenaza con construir un muro fronterizo.
Este mismo miércoles ha sido una de las sesiones más duras para la moneda azteca. La encuesta de intención de voto que Bloomberg ha llevado a cabo en Ohio, uno de los estados clave para prever el sentido de voto de todo el electorado estadounidense, da más de cinco puntos porcentuales de ventaja a Trump sobre Clinton. Una vez conocido este sondeo, cada dólar se convertía en 19,25 pesos en el mercado de divisas, un 1,3% más que al cierre de la sesión anterior.
Desde que Trump proclamó oficialmente su intención de entrar en la pugna por ser el próximo presidente de los EEUU, el peso ha perdido un 4% de su valor frente al dólar. Un porcentaje que no en tan abultada cuantía, pero sí cercana ha retrocedido también frente a otras grandes monedas del circuito internacional ante lo que podría suponer para la economía del país la aplicación de unas política arancelarias, migratorias y de cooperación mutua mucho más restrictivas por parte de Washington.
En este sentido, los analistas señalan que no son solo especulaciones. A falta del programa oficial con el que Trump se postulará para la Casa Blanca, en algunas de sus reiteradas declaraciones ha adelantado políticas más proteccionistas para con la industria estadounidense que pasaría por medidas como la ruptura o revisión del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (el TLCAN o más conocido como NAFTA por sus siglas en inglés), según él mismo ha reconocido. Asimismo, en multitud de discursos ha señalado contar con los mecanismos necesarios para obligar a México a pagar la construcción del muro divisorio en su frontera común.
Por si fuera poco, otros factores recientes han golpeado la cotización del peso en el mercado internacional de divisas. De una parte, la brusca caída de precios del petróleo, cuyo procesamiento y exportación supone una partida importante de la economía primaria mexicana. De otra, el creciente protagonismo del yuan chino en las transacciones internacionales y especialmente en economías emergentes. Así, un reciente informe del Banco Internacional de Pagos (BIS) señalaba que el ‘Gigante Asiático’ había arrebatado a la nación latinoamericana el octavo puesto en el ranking de monedas más negociadas a escala mundial.
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