La firma de infraestructuras encuentra en los 14,59 euros por acción su resistencia más inminente y sólida frente a su senda alcista. Ahí se determinará el éxito o fracaso de los bajistas. Abertis está acorralado por los especuladores bajistas como nunca antes en los últimos dos años y medio. El peso de las posiciones cortas sobre su capital social asciende a un 1,31% del mismo, lo que se traduce en un montante de 179,5 millones de euros apostado contra su desempeño bursátil cuando lucha por recuperar máximos anuales.
Las posiciones de los bajistas no dejaron de engordar a lo largo de todo el mes de marzo, el mismo en el que el mercado aparentemente concedía una tregua a Abertis. La presión de los cortos se incrementó en un 32% a lo largo del mes pasado, tiempo en el que la cotizada que preside Salvador Alemany se apuntó ganancias del 4% en Bolsa y alcanzó su máximo anual en 14,50 euros por acción.
Ante este panorama, parece que cuanto más alta es la cota que alcanza la gráfica de la firma de infraestructuras, mayor es el desplome que vaticinan los especuladores. En este sentido, cabe destacar que en sus dos episodios bajistas más pronunciados de este año, a mediados de enero y principios de febrero, la presión de estos inversores había alcanzado a un máximo del 1,1% de su accionariado.
Entre los bajistas que se hacen cada vez más fuertes en el capital de Abertis, un único nombre propio destaca en los registros de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Es el fondo británico Marshall Wace, uno de los hedge funds más activos en el mercado bursátil español en cuanto a apuestas bajistas. Sus gestores aglutinan una cartera por el 0,6% de la cotizada, un peso que sin embargo es inferior al que acumulaban el noviembre pasado, cuando por sí solos apostaban contra su gráfica de cotización un 0,8%.
Esta posición se traduce en más de 80 millones de euros contra la evolución bursátil de la compañía, en función de los actuales precios de mercado. Se trata del único inversor que a título individual supera un 0,5% del capital de la sociedad en posiciones cortas, el restante hasta la posición agregada recogida en el conteo de la CNMV se suma mediante carteras menos abultadas que controlan al menos un 0,2% del accionariado.
Desde que empezó el año hasta esta fecha, Abertis acumula una débil revalorización del 0,8%, mientras que a un año visto de cotización -las famosas 52 semanas del análisis técnico- el rumbo es marcadamente bajista con una depreciación del 15% para sus acciones. Las mismas que tienen su prueba de fuego en la sólida resistencia de los 14,59 euros por acción que varios chartistas coinciden en señalar. Del resultado del enfrentamiento con esta barrera, que se antoja evidente a la luz de su trayectoria más cercana, dependerá que los bajistas reciban premio o castigo por especulativa apuesta.
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