Metro de Madrid
La línea 11 del Metro de Madrid contará presumiblemente con 30 nuevos kilómetros de extensión según el vicepresidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio Aguado, y el Consejero de Transportes, Ángel Garrido. Sin embargo, asociaciones vecinales, como la de Carabanchel Alto, ven esta nueva promesa del Ejecutivo como «una nueva tomadura de pelo» y piden el inicio de las obras ya.
La que fue calificada como la M-40 del suburbano, ahora es llamada a ser la «Diagonal de Madrid» según el Gobierno regional. Este nuevo proyecto atravesará la comunidad de suroeste a noreste, enlazando con todas las líneas del suburbano, menos la de Metrosur, y la creación de una veintena de nuevas estaciones.
Esto se suma el último plan para esta línea, el cuál consistía en la ampliación de Palos de la Frontera, Atocha Renfe y Conde de Casal y la construcción de 6,5 kilómetros con dos nuevas estaciones: Comillas y Madrid Río. El nuevo proyecto incluirá el anterior en su tramo sur.
Por otro lado, se realizara un tramo norte y un tramo central, de 7,2 kilómetros y 8 kilómetros, respectivamente. Lo que facilitaría la conexión con paradas como Mar de Cristal, La Elipa o Arturo Soria, entre otras.
Sin embargo, estos dos proyectos no son los únicos que ha tenido la línea madrileña. En 1996 se inauguró la 11 con tres únicas paradas: Plaza Elíptica, Abrantes y Pan Bendito, aunque ya entonces prometió el ejecutivo llegar hasta Carabanchel Alto, algo que no sucedería hasta 2006.
«Este proyecto iba avanzando lentamente y de nuevo un anuncio rimbombante: la línea 11 será «la diagonal del metro», expresan desde la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto. «Hasta aquí podría parecer una noticia positiva, de reforzamiento de una ampliación ya en curso, pero la letra pequeña del anuncio es muy preocupante», valoran.
Para la asociación el nuevo recorrido del metro por el norte tiene grandes intereses: «La ciudad de la justica, el nuevo hospital fantasma y la especulación de los nuevos desarrollos urbanísticos como el propio Valdebebas». Además, temen que se le dé prioridad a este tramo frente al resto.
«A las vecinas y vecinos de Carabanchel Alto no nos pilla de sorpresa, y por eso tenemos guardadas las pancartas y otros elementos reivindicativos, que volveremos a sacar en breve, porque no estamos dispuestos a soportar una nueva tomadura de pelo.», finalizan.
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