Según los sindicatos convocantes -CGT, LAB, ESK, SIPCTE, ELA, Intersindical Valenciana, CNT (y con el apoyo en diferentes provincias de CSIF)-, la jornada de huelga ha tenido un «seguimiento mayoritario» en las grandes ciudades españolas, destacando las movilizaciones en el País Vasco o Andalucía.
Por su parte, la empresa postal ha desmentido «de una forma tajante» los motivos que esgrimen las organizaciones sindicales «minoritarias» convocantes de estos paros, y ha defendido que Correos «es y va a seguir siendo pública» y apuesta «claramente por el empleo estable y de calidad».
Asimismo, ha asegurado que siguen apostando «de una forma clara por el diálogo social, sincero y continuo», para «afrontar el futuro y los retos» de la compañía. «En Correos, nuestro objetivo principal es abordar los aspectos que más interesan a los empleados sobre cuestiones laborales y que nos van a permitir poder llevar a cabo nuestras nuevas líneas de futuro y potenciar los nuevos negocios», ha subrayado.
Dichas movilizaciones han coincidido con el Black Friday, uno de los mayores picos de producción de Correos, y los sindicatos ya han avisado que si la compañía «no cede» en las reivindicaciones, en la víspera de Navidad llevarán a cabo nuevas jornadas de huelga y protesta. «Es responsabilidad de la Dirección de la empresa resolver el conflicto y evitar así perjuicios a la ciudadanía en una época marcada por el enorme aumento de las compras a distancia», han explicado.