Jubilados
El gasto en pensiones creció un 7% el 1 de marzo, hasta los 9.576,4 millones de euros. La nómina no deja de crecer y marca un nuevo récord histórico cada mes, no solo por el envejecimiento de la población, sino también por el coste de las nuevas pensiones, que cada vez son más elevadas.
La Seguridad Social paga actualmente 968.328 pensiones de más de 2.000 euros cada mes, cinco veces más de las que había a finales de 2007, antes de que estallara la crisis económica, según los datos del Ministerio de Empleo y Seguridad Social. La cifra representa un 10% sobre el total de las pensiones, que actualmente asciende a 9,7 millones. La mayor parte se corresponde con pensiones de jubilación (892.481).
El crecimiento en los últimos años ha sido exponencial. En los años del boom económico, las pensiones de más de 2.000 euros eran una rava avis: no suponían ni el 2% del total en los años previos al estallido de la burbuja. Pero a partir de entonces todo empezó a cambiar y se llegaron a producir incrementos anuales superiores a 70.000, que se mantienen.
No solo crece el número de pensiones de más de 2.000 euros al mes, sino que cada vez son más elevadas. En el pasado mes de febrero (últimos datos disponibles) se pagan 443.000 pensiones de jubilación de más de 2.500 euros mensuales. Además, hay 38.575 pensiones superiores a 2.659,42 euros, la cuantía máxima fijada por el Gobierno.
Además, la pensión media de jubilación en las nuevas altas asciende a 1.461,97 euros, un 11,04% más que en febrero de 2018.
No obstante, la mayoría de las pensiones que se abonan siguen siendo muy bajas. De hecho, la mitad de las mismas es inferior al salario mínimo interprofesional.
Estas cuantías no se pueden sufragar solo con cotizaciones, a pesar de la buena marcha del empleo (muy lastrado por la precariedad) y de la recuperación de la economía. La deuda de la Seguridad Social con el Estado asciende a 41.193 millones, un 50,5% más que hace un año, cuando era de 27.363 millones.
El endeudamiento de la Seguridad Social se mantuvo más o menos estable en el entorno de los 17.173 millones de euros hasta el tercer trimestre de 2017, cuando empezó a repuntar debido a la liberación de cantidades del préstamo de casi 10.200 millones de euros que recibió la Seguridad Social del Estado para el pago de las pensiones.
La situación además podría agravarse a medida que la generación del baby boom vaya entrando en edad de jubilarse porque la carga sobre las cuentas públicas será mayor. Entre 1958 y 1977 nacieron en España más de 14 millones de personas. En su mayoría han tenido largas carreras de cotización, con trabajos estables, que se han traducido en la adquisición de derechos de pensión por cantidades que en suma comprometen el sistema público de pensiones.
Este es uno de los grandes retos a los que se enfrenta el país en las próximas décadas. Según el estudio Evolución de la estructura demográfica en España, del EAE Business School, en la España del año 2050 habrá 76 jubilados por cada 100 habitantes en edad de trabajar. Para entonces, junto a Japón, España presentará los indicadores de dependencia de personas mayores de 65 años y potenciales trabajadores más elevados del mundo.
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