Mario Draghi, presidente del BCE
La primera reunión de política monetaria del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) se preveía de transición, sin ningún anuncio relevante ni novedades sobre la fecha en la que terminará el programa de compra de bonos. Sin embargo, la subida del euro durante el arranque del año frente al dólar podría obligar a Mario Draghi a tener que hacer gala de su bien ganada fama de ‘mago’ de las palabras.
El euro se ha fortalecido alrededor de un 6% desde noviembre, una recuperación que ha llevado a la moneda hasta su posición más alta frente al dólar estadounidense en más de tres años, por encima de los 1,23 dólares. Dada esta “incómoda” fortaleza de la moneda única, el “máximo objetivo” de Draghi “será contener la evolución de la divisa comunitaria”, señalan los analistas de Imdi Funds.
En esta línea, estos expertos esperan que el banquero central hable de “sobre reacción del mercado” ante ciertas informaciones conocidas, entre ellas las actas de la última reunión de política monetaria del BCE, que mostraron un optimismo que alimentó las expectativas sobre un adelanto en la normalización. “Los mensajes lanzados desde el BCE, junto al acuerdo político alcanzado en EEUU, deberían servir para contener la cotización del euro frente al dólar durante los próximos días”.
A juicio de Imdi Funds, Draghi “dará un paso atrás” respecto a lo apuntando en las últimas actas, aunque los indicadores continuarán señalando un desempeño positivo de la actividad global y, en concreto, de la eurozona. No obstante, “todavía existe margen antes de asistir a niveles del euro que sean contractivos para la actividad real, debiendo tomar perspectiva más allá de los tipos de cambio nominales y el cruce frente al dólar”, señalan.
Ebury considera, por su parte, que el último repunte que se ha anotado el euro “ha sido exagerado”. “Con posicionamiento del euro en niveles de máximos históricos, hay margen para una reversión que presionaría la tasa EUR/USD a la baja”.
En cuanto a la reunión en sí misma, Ebury señala que a pesar de que los inversores esperan que la reunión del BCE del jueves arroje algo de luz sobre el momento del primer aumento de los tipos de interés en casi siete años, “creemos que es poco probable que el BCE cambie su orientación en este momento”. La institución ha reiterado repetidamente que los tipos de interés se mantendrán bajos “mucho más allá del horizonte de compras de activos”, recuerdan los analistas. Teniendo en cuenta que el programa de flexibilización cuantitativa del banco central programado para, al menos, septiembre de 2018, “creemos que es demasiado pronto para que el banco comience las discusiones sobre la necesidad de tipos más altos en la zona euro”.
“No esperamos cambios en la política del BCE esta semana”, inciden los analistas de Ebury, sino más bien “esperamos ver al presidente Mario Draghi emitiendo un mensaje bastante neutral en el que pedirá ‘paciencia’ en la política, atenuando, así, las expectativas de un aumento de los tipos de interés en 2018”. Además, a pesar de una mejora general en los datos económicos de los últimos meses, el banquero italiano “también puede ser reacio a emitir una valoración demasiado optimista de la economía de la zona euro en un esfuerzo por evitar otro fuerte movimiento alcista del euro”.
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