Banco de España
Utilizando el PIB nominal de 2021, la ratio deuda/PIB se situó en el 118,4% en el cuarto trimestre de 2021, 1,5 puntos porcentuales menos que a finales de 2020 y más de un punto por debajo de la estimación del 119,5% del Gobierno.
En cuanto a la evolución de la deuda de los distintos subsectores, el saldo de la deuda del conjunto de la Administración Central se elevó a 1,28 billones de euros en diciembre de 2021, lo que representa el 106,2% del PIB. El crecimiento, en términos interanuales, de la deuda de este subsector en el cuarto trimestre de 2021 fue también del 6,1%.
El saldo de deuda de las administraciones de Seguridad Social se situó en 97.185 millones de euros, con un crecimiento interanual del 13,9%.
Por lo que respecta a las administraciones territoriales, la deuda de las Comunidades Autónomas (CCAA) creció hasta los 312.586 millones, un 25,9% del PIB, con un aumento interanual del 2,8%. Cataluña fue la región más endeudada, con 82.369 millones de euros, por encima de la Comunidad Valenciana (53.820 millones) y Andalucía (37.291 millones). La Comunidad de Madrid, por su parte, presentó un saldo de deuda de 20.181 millones
Mientras, la deuda de las corporaciones locales –fundamentalmente los ayuntamientos- se situó en 22.068 millones de euros, lo que representa un 1,8% del PIB y supone un 0,5% más que el saldo registrado un año antes. Entre las capitales de provincia más endeudadas destacó Madrid, con un saldo de 1.680 millones de euros que prácticamente duplica el de la segunda de la lista, Barcelona (818 millones).
En cuanto a la evolución de la deuda por instrumentos y plazos, la deuda materializada en valores a largo plazo experimentó un crecimiento interanual del 6,5%, al tiempo que el incremento de los préstamos a más de un año se situó en el 8,5%. Por su parte, la variación interanual en el cuarto trimestre de 2021 de los instrumentos a corto plazo fue del -3%.
Atendiendo a la distribución del saldo según este desglose de instrumentos, en diciembre de 2021 la deuda se encontraba materializada principalmente en pasivos a largo plazo, al representar un 93,1% del total, siendo especialmente significativo el peso de los valores a largo plazo con un 80,3%, mientras que el porcentaje de la deuda a corto plazo era de un 6,9%.
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