El jefe de campaña de Trump arrestado por ‘delito menor’

Corey Lewandowski ha recibido una orden de la policía de Florida acusado de agredir a la reportera Michelle Fields Se podría pensar que era inevitable que llegase un momento como este. Después de todo la campaña de Trump se ha visto acompañada de constantes acusaciones de incitar a la violencia y al odio entre comunidades. Incluso se ha acusado a la parafernalia que rodea al neoyorquino de remitir a las formas y estética nazi.

Sin ir más lejos, hace un par de semanas, la policía de Carolina del Norte ya anunció que estaba evaluando la posibilidad de presentar cargos contra el principal favorito a hacerse con la candidatura republicana a la presidencia de EE.UU. En concreto, la oficina del Sherrif del condado de Cumberland estaría investigando las amenazas y golpes recibidos por uno de los asistentes a un acto de campaña celebrado por el multimillonario en Fayetteville en el mencionado estado.

Pero en un irónico gesto del destino, casi como perversa muestra de lealtad de esas que Trump y su entorno están demostrando apreciar antes que denostar, su jefe de campaña se ha adelantado al neoyorquino. Así, Corey Lewandowski ha recibido una orden de arresto de la polícía de Jupiter, Florida.

https://twitter.com/CahnEmily/status/714830305664876544

Se acusa al jefe de campaña de Trump de agredir a la reportera Michelle Fields en un acto que tuvo lugar el pasado 8 de marzo, en una de sus propiedades: el Trump National Golf Club. Algo que, por cierto, ya es también es una de sus señas de identidad: la faceta política del neoyorquino va indisolublemente unida a su personaje, de tal forma que las primarias realimentan a la marca Trump, mientras esta nutre a las primeras.

Según la versión de la reportera, que poco a poco parece confirmarse, Lewandowski habría agarrado a Fields por el brazo empujándola con fuerza, después de que esta hubiese hecho una pregunta sobre la discriminación positiva. Además, lo habría hecho con la suficiente intensidad como para provocarle marcas en el brazo, según las fotos que la periodista publicaría en sus redes sociales.

https://twitter.com/MichelleFields/status/708005032839548929

De esta forma, basándose en la investigación realizada en estas semanas, la policía de esta localidad de Florida ha determinado que existe «causa probable» para acusar a Corey Lewandowski de «agresión» al «tocar intencionadamente a Michelle Fields contra su voluntad».

https://twitter.com/ryanstruyk/status/714831701843771397

Hay que señalar que según la ley estadounidense esta forma de delito (‘simple battery’) conlleva que tres elementos se consideran probados más allá de toda duda razonable: a) que se haya hecho uso de la fuerza física fuera de los supuestos contemplados en la Ley, b) que se haya hecho contra una tercera persona, y c) que haya resultado en un daño físico o en tocamientos ofensivos. Asimismo, el concepto de ‘delito menor’ hace referencia a actos que reciben un castigo menos severo que los delitos, pero mayor que las infracciones administrativas.

Sin embargo, quizá lo peor de todo este asunto sea, una vez más, la reacción de Trump&Co. tras cada una de las novedades que han ido produciéndose en torno a estos hechos. En primer lugar, el propio Lewandowski acusó a Fields de delirar y negó, no sólo haberla tocada, sino incluso haber coincidido con ella.

https://twitter.com/CLewandowski_/status/708162663579144192

Una línea a la que, como quien no puede aceptar no tener el mayor protagonismo en cualquier reyerta, se unió el propio Trump. El neoyorquino comenzó por decir que «quizás Fields se inventó la historia. Eso creo que es lo que pasó»; para más adelante animar a los periodistas a comprobar el historial de la periodista.

Finalmente, tras su victoria en las primarias de Florida, el multimillonario felicitó a Lewandowski con las siguientes palabras «Buen trabajo Corey». Una frase que podría interpretrarse en un sentido general, pero que acompañaría poco después de una mención a los periodistas a los que se refirió como «gente despreciable».

Y en el mismo sentido, el equipo de Trump acaba de emitir un comunicado en el que reafirma la inocencia de Lewandowski.

https://twitter.com/Hadas_Gold/status/714832568185712640

Ello, pese a que, para respaldar sus acusaciones, la policía ha hecho público un vídeo en el que se ve como el director de campaña del multimllonario agarra por el brazo a Fields y la aparta del camino de Trump.

Pero, como ya sabíamos, la campaña de Trump no se basa en la verdad y en lo que podría ser un avance de cómo podría volverse el panorama para los ‘periodistas críticos’ bajo una hipotética presidencia del neoyorquino fue Fields quien tuvo que reunciar a su puesto de reportera en Breitbart News una semana después del incidente por la falta de apoyo de sus jefes.

Una renuncia a la que se sumarían semanas después las de varios empleados por el mismo motivo. Incluida la del antiguo editor jefe, Ben Shapiro, quien señaló en su escrito de despedida que el medio conservador, considerado cercano a Trump, había «abandonado a Fields para protejer al abusador jefe de campaña de Trump».

Mientras tanto el multimillonario ya ha dado muestra de que no piensa cambiar la estrategia que también le está funcionando hasta el momento y en un nuevo paso hacia adelante, ante las pruebas, ha optado por volver a cuestionar a la periodista.

https://twitter.com/realDonaldTrump/status/714855791199719424

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