Según ha desvelado The New York Times, ambos gobiernos llevaban 18 meses negociando en Canadá las condiciones del nuevo rumbo diplomático a instancias del Vaticano. Washington y La Habana han estado negociando durante los últimos 18 meses cómo poner fin al estancamiento que acompaña sus relaciones desde 1960. La mayoría de los contactos, según informa el diario The New York Times, han tenido lugar en Canadá. Y para encontrar al impulsor del histórico acercamiento hay que buscar en el Vaticano. De hecho, el último encuentro secreto entre ambas potencias se celebró en Roma y lo presidió el mismo Papa Francisco.
La noticia ha saltado este miércoles al amanecer (hora local) cuando fuentes de la Casa Blanca han informado a la agencia AFP que el contratista estadounidense Alan Gross, detenido en Cuba en 2009 y condenado a 15 años de prisión por atentar “contra la integridad territorial del Estado”, había sido liberado por las autoridades de la isla y ya se encontraba en una avión de las fuerzas aéreas estadounidenses regresando a EEUU.
El encarcelamiento de Gross era uno de los requisitos que exigía la diplomacia norteamericana para iniciar unas negociaciones que diesen pie a un proceso de normalización entre ambos países. Sin embargo, ha existido una contrapartida: Washington ha accedido a poner en libertad, a cambio del contratista, a tres prisioneros cubanos encarcelados en Miami tras haber sido acusado de espionaje.
El rotativo neoyorquino ha informado que el acuerdo alcanzado no implica, de momento, el fin del embargo. Sin embargo, sí implica el comienzo de las negociaciones para levantarlo y la apertura de una embajada estadounidense en La Habana por primera vez en varias décadas. De momento, los medios de comunicación están pendientes de Barack Obama y de Raúl Castro. El mandatario estadounidense dará una rueda de prensa a lo largo de la tarde y el cubano hará lo propio en la televisión nacional de la mayor de las Antillas a esa misma hora para analizar la situación.
Reacción de la diplomacia española
El ministro de Exteriores español ha comparecido ante los medios para apoyar la decisión de Obama de retomar las relaciones con el pueblo cubano. José Manuel García Margallo, ha declarado que esta es una “noticia esperanzadora” que espera que “facilite un futuro mejor a los cubanos”. Por otro lado, ha señalado que este nuevo camino sólo será sostenible bajo los “principios de la democracia y el respeto de los derechos humanos”.
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