Ciudadanos se ‘chiva’ a la vice: Guindos y Montoro ni se hablan

Villegas comunicó a Santamaría que la nula relación entre los ministros de Hacienda y Economía paraliza la negociación presupuestaria. El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, transmitió el pasado viernes a la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría la queja formal de su grupo ante las dificultades que está encontrando para negociar el proyecto de Presupuestos Generales del Estado para 2007.
 
Según informa okdiario.com “en la conversación telefónica que mantuvieron tras el Consejo de Ministros, Villegas comunicó a la vicepresidenta que la nula relación entre los ministros de Hacienda y Economía, Cristóbal Montoro y Luis de Guindos, que no se hablan, mantiene paralizada la negociación. ‘Así es imposible alcanzar acuerdos’, dice este digital que protestó el diputado de Ciudadanos.
 
Okdiario.com recuerda que aunque Rajoy decidió mantener en su puesto a los dos principales ministros del área económica, en lo que constituye un reconocimiento a la labor desarrollada durante los cinco últimos años para lograr que España saliera de la crisis. “es cierto que, desde hace tiempo, Montoro y De Guindos apenas se dirigen la palabra tras los desencuentros que, en más de una ocasión, han estallado en el propio Consejo de Ministros”.
 
Quizá por ello -afirma el mencionado diario online- se lamentó Villegas ante la vicepresidenta, los dos ministros están transmitiendo mensajes contradictorios a Ciudadanos, cuyo objetivo es poner en marcha cuanto antes los 150 acuerdos que permitieron la investidura de Rajoy como presidente.
 
Siempre según esta versión, en los contactos previos que se han desarrollado el ministro Cristóbal Montoro comunicó a Ciudadanos la necesidad de subir determinados tramos del IVA y el IRPF para cuadrar las cuentas de 2017 y cumplir el objetivo de déficit del 3,1% marcado por la Comisión Europea.
 
Ciudadanos protestó enérgicamente por esta propuesta, que vulnera el compromiso de Mariano Rajoy de no subir los impuestos durante la actual legislatura. En esta línea, el titular de Economía, Luis de Guindos, se ha mostrado convencido de que no será necesario revisar los tipos del IVA y el IRPF, porque la reactivación de la economía permitirá cubrir, sin grandes ajustes, los 5.000 millones de euros adicionales que el Estado debe recaudar en 2017 para cumplir con Bruselas.
 
En todo caso, De Guindos se muestra partidario de subir los impuestos especiales que gravan los hidrocarburos, el tabaco y las bebidas alcohólicas. Productos que tienen una demanda muy estable, por lo que su consumo no se resiente significativamente aunque se eleve la presión fiscal sobre ellos.
 
Pero estas contradicciones no son el único escollo que ha encontrado el partido de Albert Rivera, según el digital que dirige Eduardo Inda, que hace notar que  “Ciudadanos ya ha designado a su equipo negociador para pactar los Presupuestos. Estará integrado por la diputada por Canarias Melisa Rodríguez, el economista Luis Garicano, el portavoz de Economía Toni Roldán, Francisco de la Torre (presidente de la Comisión de Presupuestos del Congreso) y el diputado en el Parlament catalán Fernando de Páramo”.
 
Y que “en cambio, Ciudadanos todavía no tiene noticias del equipo negociador del PP, por lo que hasta ahora sólo se han llevado a cabo contactos informales con representantes de distintos ministerios. Algo que no ha hecho sino empantanar la negociación. En el partido naranja confían contar con la mediación de la ministra de Empleo, Fátima Báñez, con la que la relación fue especialmente fluida a la hora de pactar las 150 reformas de la investidura. La complicidad tejida entonces puede resultar especialmente útil ahora”.
 
La parálisis del PP en la negociación de los Presupuestos ha sembrado la duda en Ciudadanos, que se plantea el siguiente dilema, siempre según okdiario: o bien el Gobierno de Rajoy se encuentra todavía en un estado de profundo desconcierto, provocado por la pérdida de mayoría absoluta, o está intentando dilatar adrede los plazos para que finalmente el margen de la negociación sea mínimo y a sus potenciales aliados no les quede más remedio que aceptar sus propuestas.

Acceda a la versión completa del contenido