Niños palestinos esperan recibir alimentos gratuitos de un centro de distribución de alimentos en la ciudad de Gaza (Foto: Europa Press/Contacto/Rizek Abdeljawad)
La Franja de Gaza atraviesa una de las peores crisis humanitarias de su historia reciente. El PMA ha advertido que las cocinas comunitarias, que proporcionaban apenas el 25% de las necesidades alimentarias a la mitad de la población, se quedarán sin suministros en los próximos días. La organización también apoyaba a panaderías locales, pero todas cerraron el 31 de marzo debido a la falta de harina y combustible.
Las cocinas comunitarias de Gaza eran la única fuente estable de comida para la población, pero se quedarán sin alimentos en cuestión de días
El organismo ha alertado de que la falta de alimentos se suma a la «grave escasez de agua potable y combustible», llevando a muchas personas a buscar materiales entre la basura para cocinar. Desde hace más de siete semanas no entran suministros humanitarios ni comerciales, lo que ha disparado los precios de los alimentos hasta en un 1.400% respecto a los niveles del alto el fuego alcanzado en enero.
El PMA ha señalado que 116.000 toneladas de asistencia alimentaria están listas para ser entregadas a Gaza en cuanto se reabran las fronteras. Sin embargo, la falta de acceso ha puesto en pausa esta ayuda vital, aumentando la desesperación de una población ya golpeada por el conflicto.
Más de 116.000 toneladas de ayuda alimentaria esperan entrar en Gaza, pero el cierre de las fronteras bloquea su distribución
Además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha denunciado que sus suministros médicos también se están agotando. Dieciséis camiones con material sanitario esperan para cruzar hacia Gaza, mientras los hospitales se quedan sin recursos básicos para atender a los heridos.
El comisionado general de la UNRWA, Philippe Lazzarini, ha sido contundente: «Los niños en Gaza se mueren de hambre». Por su parte, el director de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha descrito la situación como «terrible y sombría», pidiendo el fin inmediato del bloqueo.
Las autoridades gazatíes, controladas por Hamás, han informado de que más de un millón de niños están en riesgo de hambruna, y han contabilizado ya 52 muertes por hambre y desnutrición, incluidos 50 niños. Asimismo, cifran en más de 60.000 los menores que sufren desnutrición severa.
El bloqueo israelí y la reanudación de la ofensiva militar tras el colapso del alto el fuego de enero han profundizado la crisis en Gaza. Israel justifica su operación militar como respuesta a los ataques de Hamás del 7 de octubre de 2023, que causaron alrededor de 1.200 muertos y unos 250 secuestrados.
Desde el inicio de la ofensiva, las autoridades de Gaza elevan a más de 51.400 los muertos y a unos 117.400 los heridos, incluyendo más de 2.000 muertos y 5.400 heridos sólo desde la reanudación de los ataques en marzo.
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