El consumo de cemento en España crece un 6,5% en el primer semestre y alcanza su mejor dato en cinco años

El sector del cemento en España vive un primer semestre de fuerte dinamismo, impulsado por el aumento de la obra nueva y el crecimiento sostenido en la licitación de infraestructuras. Según la patronal Oficemen, el ritmo de consumo registrado no solo supera ampliamente las cifras del año pasado, sino que marca el mejor arranque anual desde 2020. Sin embargo, en el ámbito internacional, las ventas al exterior continúan retrocediendo, lo que evidencia una mayor orientación hacia la demanda interna.

El mejor primer semestre desde 2020

Entre enero y junio, el consumo total de cemento ascendió a 7,8 millones de toneladas, lo que representa un incremento del 6,5% respecto al mismo periodo del año anterior. Tan solo en el mes de junio se consumieron 1.440.967 toneladas, un 13,9% más que en junio de 2024.

Este comportamiento, según explica Aniceto Zaragoza, director general de Oficemen, se ve atenuado por el llamado “efecto calendario”: “El consumo medio diario de junio, que solo contempla los días hábiles, ha sido algo más moderado, con un crecimiento del 8,5%”, debido a que el mes contó con cinco fines de semana completos.

En los últimos 12 meses, el consumo de cemento ha superado los 15,3 millones de toneladas, lo que supone un crecimiento del 8% interanual

Impulso de la obra nueva y las licitaciones públicas

La evolución positiva del consumo va ligada al comportamiento de la actividad constructora en España. Hasta mayo, las licitaciones de obra nueva aumentaron un 25,8%, mientras que los visados de edificación crecieron un 8,6% hasta abril.

Oficemen espera que esta tendencia positiva se mantenga en el segundo semestre, consolidando la recuperación del sector

Exportaciones a la baja: caen un 4,8% en lo que va de año

A diferencia del mercado interno, las exportaciones de cemento y clínker sufrieron un retroceso. En junio, el volumen exportado fue de 409.003 toneladas, un 0,4% menos que en el mismo mes del año anterior.

En el acumulado anual, las ventas al exterior descendieron un 4,8%, alcanzando los 2,3 millones de toneladas. Esta caída se mantiene también en el análisis del año móvil (últimos 12 meses), con un descenso del 1,6%, hasta las 4,8 millones de toneladas.

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