¿Cuáles han sido las empresas ‘agraciadas’ por las compras del BCE?

Junto a los grandes nombres como Telefónica, Daimler o Danone, el programa de bonos corporativos del BCE depara algunas sorpresas. El Banco Central Europeo (BCE) puso en marcha el proceso de compra de bonos empresariales el 8 de junio. Un mes y medio después, la institución que preside Mario Draghi ha desembolsado más de 10.400 millones de euros en estas operaciones, en las que ha adquirido títulos de alrededor de 150 compañías.
 
El pasado lunes el BCE hizo pública por primera vez la lista de títulos en sus manos en virtud de este programa de compras (CSPP), aunque sin señalar el importe o el precio al que adquirió estos bonos. Para añadir un poco más de complejidad, las compras se llevan a través de nueve bancos centrales nacionales –incluido el Banco de España-, y cada uno de ellos ha lanzado su propia lista utilizando el código Isin, un código alfanumérico de 12 dígitos único para todos los bonos corporativos.
 
En el caso del Banco de España, por ejemplo, ha adquirido títulos de Telefónica, Iberdrola, Repsol, Gas Natural, Red Eléctrica, Enagás, Abertis, Mapfre y Redexis.
 
La mayor parte de las compras llevadas a cabo por el BCE no ha sido demasiado sorprendente. Junto a Telefónica se encuentran otros gigantes europeos como las automovilísticas alemanas BMW y Daimler o el gigante de la alimentación francés Danone. Lufthansa o Telecom Italia son otras de las compañías a las que les ha tocado la ‘lotería’ del BCE.
 
En total, más de 440 bonos han sido comprados por el BCE, con las empresas de consumo, de servicios públicos y de telecomunicaciones liderando el ranking. De acuerdo con cálculos de ING Groep que recoge Bloomberg, las empresas alemanas han sido las más favorecidas, con un 39% de las compras, mientras que las de países periféricos apenas representan un 20% del total.
 
No sólo las empresas de la eurozona se vieron ‘agraciadas’ por las compras del BCE, sino también de EEUU, Reino Unido o Suiza. Así, en la lista aparecen nombres como los de la procesadora de alimentos Bunge y de la proveedora de servicios petroleros Schlumberger en EEUU, o el del gigante de la alimentación suizo Nestlé. Más sorprendente, quizás, la empresa británica Uranco dedicada al uranio.
 
Las empresas extranjeras (entendidas como las de fuera de la eurozona) pueden ser incluidas dentro del programa de compras del BCE siempre que cumplan una serie de requisitos, como gozar de grado de inversión o realizar la emisión a través de una filial local.

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