El 15MpaRato pide a la banca que se rinda y deje de apelar en los juicios de las preferentes

La plataforma ciudadana señala que una reciente sentencia del Supremo defiende que “todos los estafados con preferentes deberían recuperar su dinero”. Aunque la mayoría de afectados por las preferentes ya está ganando sus juicios y consigue recuperar su dinero, la reciente sentencia del Tribunal Supremo contra CatalunyaCaixa, pero “extensible a Bankia y otros”, viene a decir que “todos los estafados con preferentes deberían recuperar su dinero”, señala el 15MpaRato.

La plataforma ciudadana considera que “la banca haría mejor en dejar de apelar, asumir que ha perdido la guerra judicial contra sus estafados y devolver el dinero sin juicios”. “Algo parecido a lo que ha pasado con la reciente sentencia del Supremo sobre las acciones”, señala en referencia a la oferta presentada por Bankia para que los minoristas que acudieron a la salida a Bolsa recuperen su dinero.

“Mucho han cambiado las cosas en los últimos años desde que los preferentistas eran tratados como inversores y especuladores y no como ahorristas estafados”, señala asimismo el 15MpaRato, que recuerda que “este cambio no ha sucedido por casualidad sino gracias a todos los estafados que no se rindieron y al trabajo que nosotros hemos hecho desde la sociedad civil”.

Hace apenas unos días se conoció que la Sala Civil del Tribunal Supremo, en la primera sentencia que ha dictado sobre las participaciones preferentes de CatalunyaCaixa, ha condenado a la entidad a devolver 122.647 euros a dos clientes por incumplimiento del deber de información sobre los productos financieros complejos que le imponía la directiva comunitaria Mifid e incluso la legislación anterior a esa normativa.

El Alto Tribunal anuló la sentencia sobre el caso dictada por la Audiencia de Zaragoza, que dio la razón al banco, y confirmó la del Juzgado de Primera Instancia número 1 de Zaragoza, que estimó íntegramente la demanda de los dos clientes.

En relación a las preferentes, el Supremo destaca que es un producto de inversión complejo y de riesgo elevado, que puede generar rentabilidad, pero también pérdidas en el capital invertido, situándose, a los efectos de prelación de créditos, “y frente a lo que su nombre pueda erróneamente hacer interpretar, inmediatamente detrás de todos los acreedores, subordinados o no, de la entidad de crédito emisora o de la dominante del grupo o subgrupo consolidable de entidades de crédito y delante de los accionistas ordinarios y, en su caso, de los cuota-partícipes”

El Supremo destacó que la información suministrada por CaixaCatalunya a los demandantes no puede calificarse como suficiente y no se ajusta a los parámetros exigidos por la normativa que entonces estaba vigente.

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