El director de Seguridad en la Circulación de Renfe, Antonio Lanchares, ha presentado este viernes su dimisión irrevocable por el accidente del tren Alvia. El Ministerio de Fomento ha aceptado la decisión después de que el departamento trasladase el pasado martes a las asociaciones de víctimas que iba a estudiar el cese.
Lanchares está imputado en la causa judicial por el accidente ocurrido el pasado 24 de julio de 2013, que dejó un total de 80 muertos y 144 heridos. Fuentes de Renfe a Europa Press y RTVE han comunicado que el ya exdirectivo tenía la intención de renunciar al cargo tras reunirse con el ministro de fomento, José Luis Ábalos, con las asociaciones de víctimas.
En dicho encuentro, los afectados pidieron al socialista que cesara a los cargos imputados de Renfe y Adif. “Les he pedido perdón en nombre de este Gobierno. La atención a las víctimas nos ayuda a mejorar como sociedad y nos impulsa a mejorar en seguridad. He tomado buena nota de sus reivindicaciones”, aseguró Ábalos.
Lanchares consigue de esta manera salir de su puesto después de que en octubre de 2017 presentara su dimisión al conocer que era imputado. Sin embargo, Renfe frenó su salida.
El directivo era el máximo responsable de seguridad en la circulación de Renfe en el momento de la inauguración de la línea Ourense-Santiago, y también ocupaba este mismo puesto en la operadora ferroviaria cuando se autorizó la desconexión del sistema de control de la velocidad ‘ERTMS’.
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