Bandera arcoiris
La noticia de que el obispado de Alcalá de Henares imparte terapias clandestinas para curar la homosexualidad ha provocado una fuerte controversia y que se presenten distintas denuncias contra dicha Diócesis por considerar que los cursos son ilegales al vulnerar gravemente la ley la Ley de Protección Integral contra la LGTBifobia de la Comunidad de Madrid
Uno de los primeros en reaccionar tras conocer la información publicada por eldiario.es ha sido el Grupo Parlamentario de Podemos que ha presentado esta mañana en el registro de la Comunidad de Madrid una denuncia contra el Obispado de Alcalá por los cursos de homosexualidad, al entender que pueden ser objeto de “infracción muy grave” con sanciones de hasta 45.000 euros, según recoge la Ley regional de Protección integral contra la LGTBIfobia.
El diputado Eduardo Rubiño ha explicado que han presentado la denuncia ante la Consejería de Políticas Sociales contra el Obispado, a raíz de la información de ‘eldiario.es’ sobre un caso de una persona (un periodista de este medio) que habría asistido a “terapias curativas de la homosexualidad” con “recursos y personal” del Obispado, informa Europa Press.
Para Rubiño, “es un absoluto escándalo”. “Las terapias de aversión y conversión de la sexualidad son totalmente ilegales en la Comunidad de Madrid gracias a la ley LGTBI que aprobamos al comienzo de la Legislatura”, ha señalado al tiempo que ha añadido que con la denuncia exigen al Gobierno regional que “haga cumplir esta ley inmediatamente”.
También Facua, Consumidores en Acción, ha remitido una denuncia contra la Diócesis de Alcalá de Henares a la Consejería de Políticas Sociales y Familia de la Comunidad de Madrid al considerar que este tipo de sesiones representan una infracción muy grave de la Ley 3/2016, de 22 de julio, de Protección Integral contra la LGTBifobia y la Discriminación por Razón de Orientación e Identidad Sexual en la Comunidad de Madrid.
FACUA lamenta en un comunicado “las repugnantes y peligrosas conductas homófobas del obispado, que pueden derivar en gravísimos problemas psicológicos para las personas que caigan en la trampa de acudir a este tipo de seudoterapias”.
Y recuerda que en su artículo 70.4.c, la citada Ley recoge como infracción muy grave “la promoción y realización de terapias de aversión o conversión con la finalidad de modificar la orientación sexual o identidad de género de una persona”. “Para la comisión de esta infracción”, continúa el texto, “será irrelevante el consentimiento prestado por la persona sometida a tales terapias”.
Recalca esta organización de defensa de los derechos de los consumidores que las infracciones muy graves de la ley contra la LGTBifobia pueden acarrear multas de entre 20.001 y 45.000 euros y conllevar, entre otras sanciones accesorias, la “prohibición de acceder a cualquier tipo de ayuda pública de la Comunidad de Madrid por un período de hasta tres años”.
Por su parte, la asociación Arcópoli y el Observatorio Madrileño contra la Homofobia han anunciado en Twitter que también denunciarán al Obispado de Alcalá ante la Comunidad.
https://twitter.com/arcopoli/status/1112824949021032449?ref_src=twsrc%5Etfw
Arcópoli también que se han dirigido a través de Twitter a al ministro de Ciencia, Pedro Duque, y a la titular de Sanidad María Luisa Carcedo, para pedirles una reunión con el objetivo de tratar la existencia de “terapias aversivas de homosexualidad”.
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