El Gobierno defiende el pacto constitucional. Todo, de principio a fin, incluyendo la monarquía. Más aún en un momento en el que España está inmersa en una crisis sanitaria y a las puertas de otra económica y social de grandes proporciones. Este es el principal mensaje que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha enviado a los militantes del PSOE en una extensa carta en la que cierra filas con el actual Jefe de Estado.
“Todo responsable público debe rendir cuentas de su conducta y así sucederá sin excepciones”, promete Sánchez en esta misiva, en referencia a las “presuntas conductas reprobables” del rey emérito Juan Carlos I. “Nadie puede sustraerse a la transparencia de los medios informativos, ni a la acción de los tribunales”. “Ahora bien, una conducta irregular compromete a su responsable, no a la institución. Este principio afecta a los agentes sociales, a los partidos, a los gobiernos autonómicos, al propio gobierno de la nación. No se juzga a las instituciones, se juzga a las personas”.
El también secretario general del PSOE, que reitera el mensaje que ya envío el pasado martes en el último Consejo de Ministros antes del parón de agosto, asegura que el partido “se siente plenamente comprometido con el pacto constitucional en todos sus términos y extremos”. “La Constitución no fue una cesión ni una concesión”, destaca antes de añadir que “el peor error que podemos cometer es regalar a los conservadores la exclusividad del legado constitucional”.
“Nuestra Constitución ampara derechos sociales amplios que invocamos y que queremos extender y hacer efectivos. Y reconoce y ampara la pluralidad territorial de las nacionalidades y regiones que componen España”, recuerda el político madrileño. “La monarquía parlamentaria es un elemento de ese pacto, no todo el pacto. Todo el pacto es la Constitución y no se puede trocear y seleccionar a capricho. Somos leales a la Constitución; a toda, de principio a fin. Y la defenderemos a las duras y a las maduras”.
Sánchez intenta cerrar filas entre los socialistas después de que los supuestos casos de corrupción de Juan Carlos I hayan puesto en un primer plano del debate sobre monarquía y república. Ayer mismo, las Juventudes Socialistas se distanciaban de la dirección nacional y reafirmaban su apuesta por un modelo de estado republicano.
“Las presuntas acciones de Don Juan Carlos de Borbón quiebran la ejemplaridad que se le presuponía y no pueden volver a afectar a la credibilidad de las Instituciones públicas”, señalaba la organización en un comunicado en el que recordaba que “la posición de JSE con respecto de la monarquía, con independencia del titular de la corona o del estado de la opinión pública, no ha variado desde hace décadas”.
“JSE es una organización estatutariamente republicana que ha venido defendiendo el modelo de república desde hace décadas, a través de campañas políticas y declaraciones públicas de todo tipo y que aspira al establecimiento de este modelo de estado”.
Nuestra posición respecto a la monarquía, con independencia del titular de la corona o del estado de la opinión pública, no ha variado desde hace décadas:
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📄 Comunicado sobre la salida de España de Don Juan Carlos: https://t.co/JeGPF0DXwM pic.twitter.com/f1dGjfGdUJ
— JSE (@JSE_ORG) August 5, 2020
