Un nuevo enfoque para una gran ciudad

Opinión

Un nuevo enfoque para una gran ciudad

Cuando hace casi un año Ana Botella relevaba a Alberto Ruiz-Gallardón –cartel electoral del PP sólo siete meses antes- al frente de la Alcaldía de Madrid, todos sabíamos que la principal ciudad de España afrontaba una crisis económica de enorme calado. Doce meses después, desgraciadamente, a la crisis económica se une una crisis política, de ausencia de liderazgo. La terrible tragedia del Madrid Arena ha terminado por dejar al descubierto todas las carencias del equipo de Gobierno municipal, que se iban intuyendo durante los meses previos.

Improvisación, incongruencias, negligencias, ausencia de controles, falta de respeto a la legalidad… lamentablemente, ni henchidos por el mayor espíritu madrileño podríamos dibujar un semblante positivo del equipo de Gobierno de la ciudad de Madrid ante esta crisis. Desde UPyD tenemos la sensación de que el equipo de Botella, empezando por ella misma y el vicealcalde, está totalmente superado, como consecuencia de sus propios errores. No hablamos ahora solo del Madrid Arena, donde lo que nos debe mover en primer lugar es el recuerdo de las víctimas y la búsqueda de medidas que impidan, hasta donde sea posible, que algo así vuelva a suceder. Hablamos de toda esta compleja ciudad, que une al complicadísimo momento económico de toda España una aún peor situación particular como consecuencia de los derroches, durante años y años, del PP. La formación conservadora puede mirar ahora para otro lado, pero ¿quién dedicó unos 500 millones de euros a la compra y reforma del Palacio de Cibeles porque la Plaza de la Villa se le había quedado pequeña? ¿Quién disparó el ya desorbitado presupuesto de la Caja Mágica, de 120 millones de euros a 294 millones de euros? ¿Quién reimplantó la tasa de basuras, permitió el drástico aumento del IBI que pagan los madrileños y encima ahora les ofrece peores servicios, como se puede comprobar, por ejemplo, con el mismo servicio de recogida de basuras?

¿Se puede revertir la situación? No será fácil ni será rápido, pero creo que se puede, y que se debe empezar desde ya. El Ayuntamiento debe cambiar totalmente de enfoque, abandonar su gigantismo (en asesores, en coches oficiales, en estructuras, en empresas públicas innecesarias como Madrid Espacios y Congresos…) y volver a centrarse en las personas. Frente a quimeras olímpicas, grandes palabras y tanta propaganda, es hora de trabajar por mejorar la calidad de vida de todos los barrios, no sólo los turísticos, de tener muy presente que lo pequeño puede ser tan importante como lo grande, de volver a pisar el suelo, la calle. Es nuestra receta para recuperar Madrid ante un ciclo político que, tras 21 años, parece agotado.

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