Family Bhive. Retengan ese nombre. Sobre todo si pertenecen a la élite financiera o tiene dinero de cuna, como se decía en España en el Siglo XIX. El portal es la nueva red social restringida de moda entre los magnates, o aspirantes a magnate, del mundo y también entre los gestores de ‘hedge funds’, las organizaciones de caridad y los emprendedores en busca de fondos. La inscripción es gratuita, pero la riqueza del aspirante, o la solvencia del buscador de negocio o fondos para proyectos se verifica, según criterios profesionales. O eso se asegura en la página de inicio.
Hace unos tres años que una tal Caroline Garnham puso en marcha la idea y ahora se encuentra a pleno funcionamiento. Más aún, el pertenecer o no pertenecer a este selecto club internauta se ha convertido en una cuestión de honor para algunos aspirantes que no consiguen pasar el corte por un millón más o un millón menos. Todo un síntoma. Las puertas cerradas han llegado a la Red para quedarse. Ese es el futuro.
