La reaparición de Fidel Castro que, desde su inesperado regreso sale casi a comparecencia pública diaria, tuvo hasta el domingo pasado un claro color local. Aunque sus discursos, al menos aquellos no destinados a promocionar su autobiografía en compañía de sus viejos camaradas, han versado habitualmente sobre asuntos relacionados con la alta política internacional y los peligros de una confrontación nuclear en Oriente Medio, temas sobre los que se concentró en el breve discurso de diez minutos que pronunció en la sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional del Poder Popular convocada expresamente para que los diputados pudieran volver a ver al líder en directo. Tras esta peripecia, el todavía secretario general del Partido Comunista de Cuba parece decidido a darle a su regreso una dimensión mundial. El primer paso de esta estrategia globalizadora habría sido la entrevista concedida a cuatro periodistas venezolanos, de plena confianza. Fidel conversó con Andrés Izarra, Walter Martínez, Mario Silva y Vanessa Davis sobre sus temas recurrentes de estos día con algún añadido de rabiosa actualidad como la situación entre Colombia y Venezuela. La didáctica charla con el abuelito revolucionario se grabó para que fuera retransmitida simultáneamente por todas las cadenas del holding de la Alianza Bolivariana de las Américas (ALBA). A saber, TeleSur (una cadena que aspiraba a ser la CNN libre de América Latina y se ha quedado en casi nada) Venezolana de Televisión, Cubavisión, Cubavisión Internacional, Radio Rebelde y Radio Habana Cuba. Que nadie espere la publicación de las cifras correspondientes a los porcentajes de audiencia. Y eso que en la Isla, quien quiera ver la televisión no podrá ver ningún otro programa.
El principal índice de la Bolsa española empezó impasible la semana pese al ataque de Irán al país hebreo, pero finalmente cayó con fuerza…
