Blesa ordenó en 2009 a la gestora de su patrimonio que no invirtiera más de 150.000 euros en participaciones preferentes de Caja Madrid, que pagaban un rendimiento del 7%. El expresidente de Caja Madrid, Miguel Blesa, ordenó en 2009 a la gestora de su patrimonio que no invirtiera más de 150.000 euros en participaciones preferentes de la entidad, pese a que tenía disponibles más de cinco millones de euros, según publica hoy El Mundo, que cita un intercambio de correos electrónicos con Marta Alonso, la gestora de su patrimonio personal en Altae, filial de banca privada de Caja Madrid.
Blesa dedicó así apenas un 3% de sus inversiones a las polémicas preferentes de Caja Madrid, que en principio ofrecían una rentabilidad del 7%, y en contraste invirtió 250.000 euros en bonos del BBVA, un banco competidor, a pesar de que estos títulos ofrecían un rendimiento del 3,63% (casi la mitad) a un plazo de tres años.
“Quería preguntarte si vas a querer que compre Participaciones Preferentes de Caja Madrid para tu cartera. Podríamos comprar 250.000 euros. Imagino que conoces las características de la emisión, pero si quieres que lo comentemos, no dudes en decírmelo”, pregunta la gestora a Blesa en un correo al que ha tenido acceso El Mundo gracias a una fuente anónima derivada de unos colaboradores de la Comisión Anticorrupción del Partido X.
Blesa tardó sólo un día en enviar esta respuesta: “Hablaremos de las preferentes, no estoy muy seguro de querer invertir tanto en esos plazos”. Finalmente, la inversión fue de 150.000 euros, señala el diario, que destaca que Blesa invirtió también 300.000 euros en bonos de Telefónica, que ofrecían un máximo del 5,43%, y 150.000 euros en bonos del grupo alemán E.On al 4,13%.
Según el informe de Altae recogido por este medio, el patrimonio de Blesa en esta entidad llegaba ya en noviembre de 2009 a 5.024.604,66 euros frente a los 3.341.367 con los que había cerrado 2008. El 62,53% estaba colocado en renta fija, el 29% en renta variable y el resto en productos garantidos o mixtos.
