Banco Sabadell ha conseguido salvar su ampliación de capital con éxito rotundo. A falta de cifras oficiales y según varios gestores de Bolsa, el banco catalán ha encontrado con facilidad inversores para cubrir su última emisión de acciones. Un holgado resultado en el que los antiguos preferentistas y cuotapartícipes de la absorbida Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM) habrían tenido un papel protagonista.
Los 750 millones de euros en acciones que andaban pendientes de encontrar dueño en la segunda ronda de la ampliación de capital del catalán -dirigida a inversores minoristas- podrían haberlo hecho en tierras levantinas. Según fuentes conocedoras de la operación, la unidad de negocio Sabadell-CAM que aglutina las antiguas sucursales de la desparecida caja de ahorros alicantina habría cumplido con su objetivo de colocar hasta 200 millones de euros entre sus clientes.
Al respaldo mostrado en el primer tramo -dirigido a inversores institucionales- por dos de las grandes fortunas de Latinoamérica y el fondo estadounidense BlackRock, se le sumaría ahora el de los cerca de 60.000 accionistas heredados de la CAM que aún conservan posiciones en el capital del Sabadell. A la oportunidad de comprar acciones a un precio más asequible que el acordado para el canje de las antiguas preferentes y cuotas de participación de la alicantina, se le suma la agresiva campaña que las sucursales del vallesano habrían llevado a cabo en los últimos días.
De confirmarse estas cifras, cosa que tendrá lugar el próximo jueves a través del preceptivo hecho relevante remitido a las oficinas de la Comisión Nacional del Mercado de Valores, entre un 20% y un 25% del importe de la ampliación podría haberse desembolsado en los mercados regionales de la antigua CAM: Comunidad Valenciana, con especial mención para la provincia de Alicante; Murcia y Baleares.
Acorde con el calendario previsto con la entidad que preside Josep Oliú, estas nuevas acciones empezarán a cotizar el próximo martes 8 de octubre. Todas ellas tendrán los mismos derechos económicos y políticos que las que ya se negocian en Bolsa española. Los analistas ya auguran un abultado volumen de negociación para esa fecha, pues durante todo el periodo de negociación de derechos sobre la ampliación de la entidad, los registros han marcado récords multianuales. Un síntoma más, dicen, del apetito generado en el mercado por esta operación.
Está por ver si accionistas de referencia como José Manuel Lara, presidente de Grupo Planeta, e Isak Andic, propietario de la textil Mango, han acudido a la ampliación en el importe máximo correspondiente a sus actuales participaciones. El segundo de ellos acaba de renunciar a su puesto en el consejo de administración del grupo financiero, lo que ha desatado todo tipo de rumores, si bien él mismo ya ha anunciado que “seguirá formando parte como accionista” de la entidad.
Los analistas también se fijan en la revalorización bursátil acumulada por la entidad desde que se anunció la operación. Cuando lo más habitual es que el miedo al efecto dilutivo de la creación de nuevas acciones o las ventas por necesidad de liquidez de los pequeños accionistas presionen a la baja las gráficas de las cotizadas que anuncian operaciones de este tipo, las órdenes de venta no han dejado de llegar al accionariado del Sabadell, que aguanta una sólida escapada al alza en las últimas semanas.
