La presidenta de las Cortes valencianas, Milagrosa Martínez, ha respondido a la carta que el presidente del Senado, Javier Rojo, le envió por el veto que, según los socialistas, hace la responsable del parlamento y el PP en la elección de la número tres del PSOE, Leire Pajín, como senadora. El consejo de Rojo de no dilatar este nombramiento se ha encontrado con un contraataque de Martínez.
Esta dilación “obedecería a errores en el trámite correspondiente, imputables, en este caso, al grupo socialista”. Y es que, la presidenta del parlamento autonómico ha asegurado que “la información facilitada por el Síndic del Grupo Parlamentario Socialista en estas Cortes no se ajusta a la realidad de los hechos ocurridos”.
Para la popular, la culpa de toda la polémica que se ha destacado en las últimas semanas y que Pajín no pudiera ocupar ayer su escaño en la Cámara Alta y poder votar así el techo del gasto presupuestario es de sus propios compañeros de partido. En varias ocasiones Martínez expone esta tesis, ya que la presidenta de las Cortes obra “siempre de acuerdo con el reglamento y las normas aplicables”.
Así, que “Si existiese alguna dilación”, le asegura a Rojo, “obedecería a errores en el trámite correspondiente, imputables, en este caso, al grupo socialista, que es a quien la comisión del Estatuto del Diputado tuvo que solicitarle que presentara la documentación que faltaba”.
Lo que no explica Martínez es porque ha esperado a que se termine el periodo de sesiones para hacer ver a los socialistas valencianos su error y se vean obligados a esperar al mes de septiembre, con la vuelta al trabajo, para rectificar, si fuera necesario, la información facilitada.
