El PP valenciano, haciendo valer su mayoría absoluta en las Cortes Valencianas, está intentando que las preguntas sobre el ‘caso Gürtel’ de la oposición pasen desapercibidas. Así, ha fijado para los días 27 y 28 de septiembre el debate de política regional, la víspera de la huelga general del día 29, confiando en que pase desapercibido para los ciudadanos.
Pero ésta no es la única maniobra de los populares que lidera Francisco Camps. Ayer la Mesa de las Cortes Valencianas no tramitó las preguntas pendientes de Compromís sobre la contratación de empresas de la trama, que el Tribunal Constitucional ordenó este verano tomar en consideración. La presidenta de la Cámara regional, Milagrosa Martínez, aseguró que se debatirá en la próxima reunión.
Compromís ya anunció que si las Cortes no cumplieran la orden del Alto Tribunal volverán a recurrir a él para denunciar desobediencia.
