La fuerte crisis económica derivada de la pandemia pone en tela de juicio la capacidad de los ciudadanos de ahorrar y prepararse para la jubilación. Así lo muestra el Índice de preparación para la jubilación (ARRI por sus siglas en inglés) que elabora Aegon. Este indicador estudia las actitudes y comportamientos mundiales relacionados con la planificación de la jubilación y clasifica la preparación para los diferentes países en una escala de 0 a 10.
Desde 2012, la media mundial del ARRI ha fluctuado entre una puntuación de 4,9 y 6,0, lo que indica un bajo nivel de preparación, según destaca World Economic Forum. En 2020, nueve de los 15 países encuestados obtuvieron una puntuación de 6,0 o inferior, y ninguno obtuvo una puntuación superior a 8,0 que indicaría un alto nivel de preparación.
“La pandemia no hace más que exacerbar las tendencias, golpeando los puestos de trabajo, poniendo a prueba los sistemas sanitarios y cometiendo a una fuerte presión los presupuestos gubernamentales”, destaca World Economic Forum.