El Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo (BCE) ha ido más allá de las expectativas levantadas y ha anunciado hoy una ampliación de 600.000 millones de euros en el paquete de compra de activos ligado a la pandemia (PEPP), con lo que el alcance final será de 1,35 billones de euros. Las compras se extenderán “al menos”, hasta junio de 2021, frente al plazo anterior previsto de diciembre de este año.
El consenso del mercado había apuntado a una cifra de 500.000 millones de euros, aunque algunos expertos habían manejada cifras aún superiores, de 750.000 millones. Según ha explicado en un comunicado la institución que preside Christine Lagarde, “en respuesta a la revisión a la baja de la inflación en el horizonte proyectado, el incremento del PEPP facilitará aún más la postura de la política monetaria general, apoyando las condiciones de financiación en la economía real, especialmente para las empresas y los hogares”.
Asimismo, las compras continuarán realizándose “de manera flexible a lo largo del tiempo, en todas las clases de activos y entre jurisdicciones”. Asimismo, el horizonte de las compras se extenderá “al menos” hasta finales de junio de 2021, señala la institución, frente a la previsión anterior de diciembre de 2019. En cualquier caso, “el Consejo de Gobierno realizará compras de activos netos bajo el PEPP hasta que juzgue que la fase de crisis del coronavirus ha terminado”.
Por primera vez, el BCE habla también del proceso de reinversión de los bonos que se vayan comprando mediante este programa, fijando el plazo “al menos hasta finales de 2022”. El máximo responsable de política monetaria aclara que la cartera se gestionará para evitar interferencias.
El BCE mantiene sin cambios los tipos de interés
En cuanto al programa de compra de activos (APP), continuará a un ritmo de 20.000 millones al mes, junto a la extensión de 120.000 millones adicionales hasta final de año. “El Consejo de Gobierno continúa esperando que las compras de activos netos mensuales bajo la APP se ejecuten durante el tiempo que sea necesario para reforzar el impacto acomodaticio de sus tasas de interés y terminen poco antes de que comience a elevar las tasas de interés clave del BCE”.
Las reinversiones continuarán durante “un período prolongado después de la fecha en que el Consejo de Gobierno comience a elevar los tipos de interés y en cualquier caso durante el tiempo que sea necesario”.
Tampoco cambios en los tipos de interés: el tipo de referencia para sus operaciones de refinanciación se mantiene en el 0%, mientras que la tasa de facilidad de depósito continuará en el -0,50% y la de facilidad de préstamo en el 0,25%. La institución reitera que espera que los tipos “se mantengan en sus niveles actuales o más bajos hasta que haya visto que las perspectivas de inflación convergen sólidamente a un nivel suficientemente cercano, pero inferior, del 2% dentro de su horizonte de proyección”.
