Buxadé (Vox) tilda de «hermosas» las imágenes de la policía griega de represión a refugiados en la frontera con Turquía

Refugiados

Buxadé (Vox) tilda de «hermosas» las imágenes de la policía griega de represión a refugiados en la frontera con Turquía

Cree que muestran "un pueblo defendiendo su libertad ante la agresión de personas que pretenden entrar de forma masiva y descontrolada".

El jefe de la delegación de Vox en el Parlamento Europeo, Jorge Buxadé

El eurodiputado de Vox Jorge Buxadé ha calificado este miércoles de «hermosas» las imágenes de la policía de Grecia reprimiendo la entrada de refugiados en el país y que a su juicio muestran a «un pueblo defendiendo su libertad».

Buxadé ha insistido durante los últimos días en la necesidad de que la Unión Europea apoye el cierre de fronteras con Turquía y ha exigido al Gobierno de España que respalde a Grecia para evitar «avalanchas inmigratorias».

En un vídeo grabado a las puertas del Parlamento Europeo, Buxadé denuncia que su presidente, David Sassoli, «solo está preocupado por la protección de los supuestos refugiados» que se agolpan en la frontera.

«Vox lo tiene claro. Si la Unión Europea no es capaz de apoyar al Gobierno de Grecia y de Bulgaria en su lucha por la defensa de las fronteras de Europa, que son las fronteras de nuestra libertad y modo de vida, el edificio del Parlamento de Europa se vendrá abajo», ha avisado.

Frente a ello, ha insistido en que cada país pueda ejercer su soberanía y emplear a sus fuerzas de seguridad, e incluso al Ejército si fuera preciso, en defensa de su territorio.

«Son imágenes hasta hermosas, un pueblo defendiendo su libertad ante la agresión de miles y miles de personas que pretenden entrar de forma masiva y descontrolada», relata.

A la vez, concede que la Unión Europea debe abordar la situación de esos refugiados que se congregan en Turquía, así como los que se encuentran en las costas de Libia, Marruecos o Mauritania «esperando dar el salto» a Europa.

Buxadé culpa de ello a la «izquierda radical» que promete a estas personas «un paraíso que no existe» y genera el riesgo de convertir Europa «en un pequeño infierno para todos».

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