El presidente de la gestora de Ciudadanos, Manuel García Bofill, ha señalado que el actual vicepresidente de la Junta, Francisco Igea, es un hombre de «fuertes convicciones» con el que es «fácil entenderse», al tiempo que ha asegurado que es «libre», como «cualquier otro afiliado», de presentarse a las primarias que elegirán al próximo presidente del partido tras la dimisión de Albert Rivera. Así lo ha señalado, en declaraciones recogidas por Europa Press, minutos antes de participar en Valladolid en una Asamblea con militantes de Ciudadanos y en la que ha estado acompañado por el portavoz adjunto de la Gestora, Joan Mesquida, el secretario de Comunicación en funciones, Francisco Hervías, y el responsable de finanzas, Carlos Cuadrado.
García Bofill ha rechazado que el partido tenga «miedo» a Igea, que ha reclamado cambios en la estrategia y la organización del partido, y medita presentarse a las primarias si no se producen. «Es una persona de fuertes convicciones, pero es fácil hablar con él porque es dialogante y ahora es una muy buena ocasión de hacerlo delante de los afiliados y exponer nuestros argumentos para llegar acuerdos en muchas cosas porque todos queremos que el partido salga unido y cohesionado de este proceso», ha añadido.
Una negociación que no cierra la opción de que el que fuera candidato de la formación en las últimas elecciones autonómicas se presente. «Es libre de hacerlo como cualquier otro afiliado. Otra cosa es que de la impresión que haya un liderazgo bastante definido, lo que no quita que se presente una nueva lista porque es un proceso abierto», ha puntualizado.
En este sentido, insiste en que tanto la gestora que el preside como Igea tienen «absoluta afinidad» en la «necesidad» que España tiene de un partido como ciudadanos y de las «dificultades» por las que está atravesando el constitucionalismo; así como de tener un modelo de partido que diga «lo mismo en todas partes». «Es lógico discrepar sobre equipos, pero lo importante es no tener problemas de fondo y estratégicos», ha puntualizado.
García Bofill ha zanjado la cuestión al señalar que ahora es tiempo de decir lo «que se piensa, cerrar los debates democráticamente e impulsar el debate hacia adelante».
