Unidas Podemos tomó este martes la iniciativa y trasladó al PSOE una nueva oferta para “retomar el diálogo” y conformar un Gobierno de coalición que aleje la amenaza de una repetición electoral. Algo que los socialistas han rechazado de lleno. Para Ferraz es “inviable” estar juntos en un mismo ejecutivo. Pero esto no es lo único que hay en las 119 páginas del documento de Pablo Iglesias y los suyos. En él también se plantean algunas propuestas en materia de fiscalidad y qué debería hacerse con algunos impuestos.
“La lucha contra la precariedad, por el empleo digno y las pensiones justas, unido a la garantía de acceso y de calidad de los derechos básicos del Estado del bienestar requiere del aumento de los ingresos públicos”. Así lo defiende Unidas Podemos, que aboga por “acercarnos a la media europea” y una “mayor justicia fiscal”. Para ello ponen sobre la mesa la necesidad de subir algún que otro gravamen.
Tasa Tobin: Los de Iglesias proponen gravar con un 0,2% las operaciones de compra de acciones españolas ejecutadas por operadores del sector financiero. “Solamente se someterán a tributación al 0,2% las acciones emitidas en España de empresas cotizadas cuya capitalización bursátil sea superior a 1.000 millones de euros”, se explica en este documento, que señala que esta medida no afectará a la compra de acciones de pymes y empresas no cotizadas. Además, quedarían fuera la deuda, tanto la pública como la privada, y los derivados.
Sociedades: Unidas Podemos pide reformar este impuesto “garantizando una tributación mínima del 15% de las grandes corporaciones, que se ampliaría hasta el 18% para las entidades financieras y empresas de hidrocarburos”. Asimismo, se bajaría del 25% al 23% el impuesto para las pymes (aquellas que facturen menos de un millón de euros).
Sicav: Los morados quieren “ejercer un mayor control” sobre ellas otorgando a la Agencia Tributaria “la competencia para declarar a efectos exclusivamente tributarios el incumplimiento de los requisitos establecidos en la normativa financiera”. A esto hay que sumar que “se establecerán requisitos adicionales para la aplicación por las Sicav del tipo impositivo reducido tendentes a asegurar su carácter de instrumento de inversión colectiva”.
Socimi: “Se aplicará un tipo de gravamen del 15% sobre los beneficios no distribuidos por este tipo de entidades”, sostiene en su oferta al PSOE.
IRPF: Unidas Podemos quiere incrementar dos puntos los tipos impositivos sobre la base general “para los contribuyentes que tengan rentas superiores a 130.000 euros y cuatro puntos para la parte que exceda de 300.000 euros”. Respecto al tipo estatal sobre las rentas del capital, “se incrementará en 4 puntos porcentuales para dichas rentas superiores a 140.000 euros”.
Patrimonio: Con el objetivo de “poder financiar correctamente el Estado de Bienestar”, el grupo confederal cree que “es imprescindible reforzar la progresividad general del sistema, y en particular recuperar el gravamen a los grandes patrimonios”. Por ello, plantean subir el 1% a las fortunas de más de 10 millones de euros.
IVA: “Aplicación del tipo reducido en el IVA para los productos de higiene femenina, que pasarán del 10% al 4%”, defiende Unidas Podemos, que reduciría también el tipo de gravamen de IVA de los servicios veterinarios al tipo reducido del 10%.
Servicios Digitales: En este documento se habla también de la creación de un Impuesto sobre Determinados Servicios Digitales para “gravar aquellas operaciones de la Economía digital que actualmente no tributan”. “Únicamente tributarán las empresas con ingresos anuales totales mundiales de al menos 500 millones de euros y con ingresos en España superiores a los 3 millones”, afirman los de Iglesias, que destacan que gravarán al tipo del 3% los servicios de publicidad en línea, servicios de intermediación en línea y la venta de datos generados a partir de información proporcionada por el usuario.
Juego online: Se propone reorientar la tasa “por la gestión administrativa del juego que pagan los operadores online para destinar un porcentaje a iniciativas preventivas, de sensibilización, de intervención y de control, así como de reparación de los efectos negativos producidos por la actividad del juego”. Asimismo, “se incrementarán los impuestos a estos negocios, con el objetivo de aumentar la inversión en la prevención y el tratamiento del daño social que producen”.
A todo esto hay que sumar otras iniciativas como mantener a Bankia como un banco público, así como limitar las exenciones de dividendos/plusvalías de sociedades por su participación en sociedades filiales. Sin olvidar el aumento progresivamente del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) hasta alcanzar los 1.200 euros al final de la legislatura, estableciéndolo en 1.000 euros en 2020 y 1.100 euros en 2021.
